Por Stakeholders
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Las innovaciones en materia medioambiental no dejan de sorprender, y Eslovaquia se ha destacado como pionero al convertirse en el primer país del mundo en utilizar colillas y cigarrillos electrónicos para la construcción de carreteras. Esta iniciativa, llevada a cabo por el gobierno eslovaco, representa un paso audaz hacia la sostenibilidad y la reducción de la contaminación.
La nueva carretera, inaugurada en octubre de 2022 y con una extensión de aproximadamente 100 metros, conecta un parque con una piscina al aire libre. Este proyecto no solo demuestra el compromiso de Eslovaquia con la adopción de técnicas ambientalmente conscientes, sino que también aborda el desafío de reciclar colillas, que contienen diversas sustancias contaminantes.
La empresa municipal de recogida de basuras de Bratislava, OLO, estima que más del 50% de las colillas terminan en el suelo, convirtiéndose en una fuente significativa de contaminación. La iniciativa busca no solo incorporar residuos en una economía circular, sino también limpiar activamente el entorno.
El proceso de construcción de la carretera implica la transformación de los filtros de colillas en fibras de acetilcelulosa, que se integran al asfalto. Hugo Repán, gerente de EcoButt, una entidad de reciclaje, destacó la magnitud del proyecto: «Cuando hicimos la primera carretera del mundo en Ziar nad Hronom utilizando colillas, se emplearon más de 150 kilogramos de nuestro granulado en 200 metros cuadrados. Es decir, más de 10 millones de filtros de cigarrillos y cartuchos de tabaco».
La apuesta de Eslovaquia por esta tecnología innovadora no solo representa un avance en la gestión de residuos, sino también un ejemplo inspirador para otros países que buscan soluciones creativas y sostenibles para preservar nuestro planeta. La construcción de carreteras con colillas de cigarrillos se erige como un hito significativo hacia un futuro más limpio y responsable con el medio ambiente.
