La pandemia por el COVID-19 ha obligado al Gobierno a implementar un estado de emergencia en el Perú, lo que está causando serias amenazas a la supervivencia de miles de familias que viven de la artesanía, siendo uno de los sectores más afectados por las medidas de aislamiento social obligatorio, factor que ha profundizado más la situación crítica que vienen atravesando desde antes de la aparición de la enfermedad causada por dicho virus.
Así lo sostuvo el presidente de la Asociación “Pueblos Artesanos”, Rubén Baldeón, quien explicó que la artesanía es una actividad económica y cultural, desarrollada generalmente por trabajadores independientes formales e informales que ahora tienen graves problemas económicos que amenazan su supervivencia. “Ello debido a la paralización y ausencia de ventas de sus productos en el mercado local y turístico”, acotó.
Este panorama se torna más oscuro, conociendo la drástica reducción de alrededor del 90% de la población artesanal del Perú, de 2 millones a 200,000 artesanos, entre el 2006 y el 2020.
Al respecto, Olinda Silvano, maestra artesana shipiba de la Asociación “El Ayllu”, señaló que actualmente existen más de 80,150 artesanos (74% mujeres) inscritos en el Registro Nacional del Artesanos (RNA), según el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur). Aunque se estima que a la fecha existan cerca de 200,000 artesanos a nivel nacional, “y la gran mayoría en situación de pobreza”
Por su parte, Germán Guillén, maestro artesano de Pueblos Artesanos, manifestó que han recibido cientos de solicitudes y demandas urgentes de artesanos de Lima y regiones del interior del país, expresando su preocupación y desesperación porque no cuentan con recursos económicos por la ausencia de ventas de artesanías en los mercados locales y turísticos, que es su principal fuente de ingresos. “Muchos de ellos no han recibido el bono de 380 soles otorgado por el Gobierno como parte de sus estrategias económicas durante el estado de emergencia sanitaria en el país.
Rubén Baldeón hizo un llamado al Mincetur y a la Presidencia de la República para que se incluya a los artesanos y artesanas del país como beneficiarios del bono de 380 soles, que requieren para mantener a sus familias y talleres artesanales, iniciándose con los que están inscritos en el RNA, y luego a los artesanos informales que puedan inscribirse en el citado registro, buscando llegar a todos los artesanos del país, especialmente de las comunidades nativas amazónicas y andinas.
En esa línea, destacó el valioso aporte de los artesanos en la construcción de la identidad cultural del Perú, y en los nuevos retos que asumirán las familias en este nuevo escenario.
De otro lado, en Alemania, también amenazado por el coronavirus, la ministra de Cultura, Monika Grütters, anunció hace poco un paquete de rescate para los sectores culturales y creativos y los medios asociados a ellos. En ese sentido, se ha declarado a este sector como un “Bien de primera necesidad”, para recibir ayudas ante la crisis ocasionada del Covid-19.