Por Stakeholders
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Gracias al uso de materiales reciclados posconsumo, Natura logró evitar –solo en 2016-, un descarte equivalente a 5,18 millones de botellas PET de dos litros. En ese mismo año, fueron usadas 243 toneladas de PET reciclado en la producción de envases para líneas como Ekos, Sève y Natura Homem. La empresa también recicló una cantidad de vidrio equivalente a más de 1,2 millones de botellas de 290 ml.
La innovación del portafolio de productos ha sido fundamental para los resultados obtenidos en los últimos años. Natura se ha enfocado en el aumento del uso de materiales de menor impacto ambiental, como productos de la línea de perfumería con vidrio reciclado y el repuesto de la línea Ekos, totalmente hecho de PET reciclado.
Además, Natura aumentó el uso de polietileno verde (plástico verde), un insumo producido a partir del etanol de la caña de azúcar, materia prima renovable, a diferencia de los polietilenos tradicionales, que utilizan materias primas de fuente fósil, como el petróleo o el gas natural.
“Sólo en la línea de cabello Plant, el uso de plástico verde evita la emisión de 802 toneladas de carbono por año, una reducción de gases de efecto invernadero equivalente a 138 viajes en auto alrededor de la Tierra”, detalló Vanessa Macher, Gerente de Asuntos Corporativos y Sustentabilidad de Natura.
Calculadora de Impacto Ambiental
Al utilizar materiales posconsumo, Natura estimula la demanda final de material reciclado, fortalece las cooperativas de recolectores y disminuye el impacto ambiental generado por la producción de envases, reforzando así su compromiso con la sustentabilidad. “Del total de envases producidos por la compañía, el 20% ya son ecoeficientes, es decir, contiene 50% menos plástico en su composición o más de la mitad de los materiales son reciclados posconsumo o de origen renovable”, agregó la representando de la empresa.
Más allá de la preocupación con el ciclo de reciclaje de los envases después del consumo, la empresa desarrolló una ‘calculadora’ de impacto ambiental que ayuda a los especialistas a perfeccionar la técnica de mitigar los impactos ambientales de los nuevos productos, contribuyendo a elevar el índice de reciclaje. Gracias a su aplicación, el año pasado el índice de reciclabilidad alcanzó el 51%.
