Por Stakeholders
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A pocos días de haber asumido el poder, el presidente Lula da Silva revocó la medida que permitía la tala de madera en las reservas indígenas de Brasil. Así lo confirmó la ministra de los Pueblos Indígenas, Sônia Guajajara, en un mensaje en las redes sociales.
La medida fue revocada el mismo día en que entraba en vigor, lo que impidió que fuera aprovechada por cualquier empresa para legalizar maderas extraídas ilegalmente de tierras indígenas.
«Revocada la instrucción normativa 12 de 2022 de la Funai (Fundación Nacional de los Pueblos Indígenas) y del Ibama (Instituto Brasileño de Medio Ambiente) que facilitaba la explotación de recursos madereros en las tierras indígenas«, señaló la primera indígena en asumir el cargo de ministra en Brasil.
Cabe mencionar que la revocación de la medida fue una promesa de Lula en su discurso de toma de posesión.
Un peligro para la Amazonia
El cuestionado decreto había sido aprobado por el expresidente Jair Bolsonaro a finales de diciembre y permitía que tanto los propietarios de las reservas como organizaciones de composición mixta explotaran comercialmente madera extraída de las reservas.
El texto recibió fuertes críticas, tanto de juristas y del Ministerio Público, ya que autorizaba la explotación de territorios protegidos por la Constitución, amenazando aún más la preservación de la Amazonía.
Según un estudio publicado la semana pasada por el Instituto de Investigaciones Ambientales de la Amazonía (IPAM), seis de las diez reservas indígenas que registraron el mayor aumento de deforestación en la Amazonía entre 2019 y 2022 son territorios con presencia de pueblos aislados.
