Por Stakeholders

Lectura de:

Hans Rothgiesser
Miembro del Consejo Consultivo Stakeholders

Hans Rosling fue un médico sueco que se dedicó a entender la estadística y la data y presentarla de la manera más digerirla posible, de tal manera que funcionarios o empresarios o personas en general entendieran mejor los problemas económicos y sociales. Quizás muchos hayan oído hablar de la Fundación Gapminder, que difunde estadística e información social, económica y ambiental a distintos niveles, para poder encontrar las mejores maneras de alcanzar los objetivos del milenio.

Pues Gapminder fue fundada por él, su hijo Ola Rosling y la esposa de éste Anna Rosling Ronnlund. Luego de que obtuviera su doctorado, se dedicó a esta noble misión. Tuvo un programa en la BBC, The joy of stats, tuvo un documental Don’t panic. Tuvo más de una presentación en TED. En 2009 fue nombrado uno de los 100 pensadores globales ejemplares por la revista Foreign Policy, en el 2011 fue uno de las 100 personas más creativas del año en la revista Fast Company, en el 2012 fue nombrado una de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista Time. En 2012 fue elegido miembro de la Academia Sueca de Ciencias. Es decir, fue una persona influyente que logró hacer llegar su mensaje.

En una de las charlas que dio en TED cuenta que en una ocasión visitó el sótano de un experto en vinos, que le contaba que tenía vinos tintos, secos, semisecos, ordenados por años y por procedencias y por distintas características que él no entendía. Sin embargo, para el coleccionista de vinos eran importantes y trataba de explicarle por qué. Pero Rosling no entendía nada. En un momento consideró que se trataba de un problema con él. Que tenía problemas de comprensión de algún tipo.

No obstante, después razonó que, así como este amigo comprendía las diferencias sutiles entre distintos vinos, Rosling dominaba distintos tipos de pobreza, de programas sociales, de data sobe desigualdad, etc., así como las diferencias sutiles entre todo esto. Algo que no todos comprenden, así como no todos entienden las diferencias entre vinos.

De igual manera, muchos necesitamos de alguien que entiende las distintas diferencias sutiles que existen de discriminación de género para abrir los ojos y darte cuenta de que las cosas no son tan equitativas como uno podría pensar. Sí, varias de las empresas top en el Perú tienen programas establecidos para velar por la igualdad de género.

La ejecutiva peruana Inés Temple cuenta, por ejemplo, que cuando habla con ejecutivos acerca de la importancia de pagar lo mismos a ejecutivos hombres y mujeres, de dar iguales oportunidades y otros temas allegados, ninguno suele discutirle. Suelen estar de acuerdo con ella y aceptar sus propuestas para avanzar en esa dirección. No obstante, a la hora de la hora, cuando hay que decidir a quién poner de nuevo gerente, caen en todos los charcos y terminan olvidándose de todo lo conversado.

Por eso necesitamos discutir más el tema de la equidad de género en todos los niveles. En los textos que se enseñan en los colegios, en los procesos de contratación de personal, en distintos trámites burocráticos, etc. Se ha avanzado mucho en los últimos años, pero aún es insuficiente. Se necesita tener aun mayor difusión, de tal manera que más personas vean las diferencias y dejen de necesitar que alguien más venga y le haga notar que está discriminando o que no le está dando las mismas oportunidades a las mujeres que a los hombres.







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