Elmer Ramírez
Profesor principal de UTEC,
experto en energía.
La energía solar, considerada como energía renovable, es un recurso disponible en la naturaleza virtualmente inagotable. Existe muchas formas para su aprovechamiento que va desde la tecnología solar, que consiste en la conversión de la radiación en electricidad, o mediante tecnología termosolar, cuyo principio es la captación de la energía solar para el calentamiento de agua u otros fluidos para su posterior transformación en energía calorífica, y finalmente, sistemas fotovoltaico híbrido que combina ambas tecnologías. Es importante señalar, que la energía, aún muy poco aprovechado por el hombre, será la mejor alternativa para salvaguardar el planeta y la sostenibilidad energética de la población.
El problema del medioambiente ha originado un desequilibrio del ecosistema en casi todos los lugares del mundo, implicando que se activen una serie de alarmas para la descarbonización, especialmente en aquellos países donde hay un uso irresponsable de la energía que contribuye al aceleramiento del calentamiento global y originando un impacto social y económico. Las últimas predicciones a este problema indican, que el aumento sostenido de la temperatura mundial continuará en la medida que no se tomen acciones conjuntas, por ello, la preocupación de los países está en la necesidad de migrar hacia una transición energética, lo que implica el uso acelerado de las energías renovables para la producción de energía en sus diferentes formas, siendo estas privilegiadas por su casi nulo impacto ambiental.
Generar electricidad mediante fuentes eólica y solar representó más del 10% en el mundo el 2021, según Global Electricity Review 2022 de EMBER; se estima que la demanda de energía solar se incremente en un 20% entre los años 2023-25, según Bloomberg Intelligence. Así también, la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) indica que las energías solar y eólica deben ser utilizadas en todos los sectores energéticos hasta el 2030. Actualmente, los 5 países que lideran el uso de la energía solar son China, USA, Japón, Alemania y la India, sin embargo, pese a que en los últimos tres años el precio de los paneles se ha incrementado como consecuencia de la pandemia, seguido de problemas de cadena de suministro y actualmente por el conflicto de Ucrania, se espera que los precios disminuyan y que su producción se intensifique especialmente para la producción de electricidad.
Con respecto a las tecnologías de aprovechamiento de la energía solar en electricidad, se basan en dos tipos de sistemas. El primero, los off-grid, cuyo aprovechamiento es para uso exclusivo en viviendas o sistemas aislados en el orden de los Vatios y KW, los cuales radica su importancia por la autonomía de la disponibilidad de la energía y están muy difundidos también en la Generación Distribuida. El segundo tipo son los on-grid para la producción de energía a gran escala, los cuales son denominados también parques solares y con una magnitud de potencia del orden de los MW. Estos últimos se caracterizan por su rápida construcción dependiendo del tamaño, en muchos casos los estudios preliminares pueden demorar unos 2 años y su construcción otros 2 años en promedio.
Actualmente, el Perú cuenta con 7 plantas solares que en total asciende a 284 MW y en proceso de construcción la planta Las Dunas de 150 MW, así también, existen proyectos aprobados que están en proceso de estudio.
La matriz energética del Perú básicamente está conformada con producción de electricidad de fuentes hidráulica y Gas Natural con un reducido porcentaje de renovables, sin embargo, estamos convencidos de que el camino correcto para la transición energética es promover la participación de energías renovables en el sistema y, con ello, contar con una diversificación energética del país contribuyendo al cuidado del medio ambiente.