El Puerto de Chancay, impulsado por COSCO Shipping y concebido como la gran puerta comercial entre Perú y Asia, ha comenzado a reconfigurar el mapa logístico del Pacífico. Su rápida expansión, sumada a su capacidad para recibir megabuques y reducir tiempos de tránsito, lo posiciona como un actor estratégico en la región.
A un año de su inauguración, los avances son significativos, pero el proyecto aún enfrenta desafíos clave. Mario Roncal, Jefe de Carrera de Negocios Internacionales y Logística de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya (UARM), conversó con Stakeholders, donde señaló el impacto y los retos que supone la puesta en marcha del Puerto de Chancay en Perú.
A más de cinco años del inicio de su construcción y un año de su inauguración, ¿ha cumplido con las expectativas de la población local en términos de empleo, desarrollo urbano y calidad de vida?
El desarrollo del Puerto de Chancay es un desafío que el Estado Peruano tiene junto con la empresa privada, la inversión que desarrolla COSCO SHIPPING definitivamente genera expectativas poblacionales.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que es el Estado el responsable de la infraestructura, servicios y desarrollo urbano que requerirá este puerto para que funcione operativamente, según lo proyectado por la empresa.
La Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN) comunicó en el mes de abril que ejecutará 21 proyectos de inversión en la zona de influencia del Puerto de Chancay que beneficiará a 2.7 millones de habitantes. Esto ha llevado a firmar convenios con diferentes entidades del estado para su ejecución (MINDEF, MINITER, GORE Lima, Municipalidad provincial de Barranca, Municipalidad distrital de Aucallama), el plan tiene como fin cerrar brechas en los indicadores sociales y económicos, generando el mejoramiento de la infraestructura pública. La inversión en esta etapa será de 820 millones de soles.
Es importante tener en cuenta que las expectativas de la población dependen del desarrollo económico del país y del apoyo e interés del Estado para acompañar los proyectos de inversión de la empresa privada con el fin de que estos logren cumplir con sus proyecciones y objetivos, generando movimiento económico en las zonas de impacto. De esta manera, la población local se verá beneficiada del impacto en cuanto a infraestructura y servicios públicos y privados que mejoren su calidad de vida.
Una de las metas iniciales del proyecto era descongestionar el Puerto del Callao y descentralizar el sistema logístico nacional. ¿Hasta qué punto Chancay ha logrado —o podrá lograr— redistribuir las operaciones marítimas del país y fortalecer la competitividad de otras regiones portuarias?
En su etapa inicial, según una nota de prensa del IPE de agosto de este año, “el puerto de Chancay, que inició operaciones en noviembre de 2024, movilizó 1.2 millones de tm, equivalentes al 3.5% del total nacional”.
De acuerdo con el INFORME DE ACTUALIZACIÓN DE PROYECCIONES MACROECONÓMICAS 2025-2028 del MEF “se comenzaría la segunda etapa del Puerto de Chancay a partir de 2027 con una inversión mayor a US$ 1 300 millones, que complementarían la primera etapa de la infraestructura portuaria y buscaría abastecer a la mayor demanda esperada de servicios portuarios asociados a la consolidación del hub portuario”.
¿Cuáles son hoy los principales cuellos de botella que podrían limitar la expansión del puerto? ¿Qué papel deben cumplir el Estado y la inversión privada para superarlos?
El Estado viene desarrollando proyectos de inversión en servicios públicos como se ha indicado anteriormente y a través del MTC ha anunciado el proyecto del Ferrocarril de la costa de Pucallpa – Chancay, unirá la Amazonía peruana con Brasil en dirección al Puerto de Chancay, se estima que en el IV trimestre del 2025 se convocará la elaboración del estudio de preinversión.
Asimismo, indicó que existen proyectos revisados en el que se encuentran el Par Vial Serpentín–Variante Pasamayo, la Vía Evitamiento Chancay–Chancayllo, la carretera Oyón–Ambo, la carretera Acos–Huayllay, los Ferrocarriles Lima–Barranca, estos importantes proyectos indican que beneficiarán a miles de pobladores.
En el contexto de la guerra comercial entre EE.UU. y China, ¿qué implicancias geopolíticas tiene este proyecto para el Perú? ¿Podría el país convertirse en un nodo logístico clave o quedar expuesto a presiones externas?
Nuestro país depende de exportaciones a China como a EEUU, y el desarrollo de nuestra política exterior ha sabido manejar este flujo sin tener implicancias geopolíticas en la región.
Sin embargo, actualmente existe una competencia comercial muy fuerte entre ambos países que podría generar un mayor escrutinio en temas de ciberseguridad portuaria, acceso a datos logísticos, transparencia contractual y potencial de uso dual (escala de buques, combustible, talleres).
Asimismo, podría generar un mayor control sobre cadenas con destino EE.UU. (CTPAT, CSI, AEO), intercambio de datos avanzados y posibles revisiones si se percibe riesgo de interferencia extranjera.
¿Cómo cambia el mapa portuario de Sudamérica con la entrada en operación de Chancay? ¿Qué efectos se prevén en la competencia con puertos como Callao, Guayaquil, Valparaíso o Santos? Y, desde una mirada estratégica, ¿cómo puede el Perú evitar que esta concentración logística afecte el equilibrio comercial y ambiental de la región?
El puerto de Chancay en su propuesta de valor ofrece un acceso directo a Asia, alta productividad operativa y un ecosistema logístico integrado, con potencial para reducir tiempos de tránsito y costos en la costa occidental de Sudamérica.
Dentro de ello, Chancay ofrece servicios directos de Asia a la costa oeste de Sudamérica con menos recaladas, concentrando transbordo y alimentando, vía feeders, a Ecuador, Chile, sur de Perú y Bolivia. Un tema importante es la mayor capacidad de patio y muelle, junto con automatización y ventanas de atraque más predecibles, lo que presionará a la baja tarifas y tiempos de estadía, beneficiando exportadores e importadores.
Más allá de Lima y Huaral, ¿de qué manera las demás regiones del país podrían beneficiarse del puerto de Chancay? ¿Qué políticas de articulación logística o de valor agregado serían necesarias para que esta infraestructura impulse la industrialización y el desarrollo regional, y no solo el tránsito de mercancías?
El MEF informó, en marzo de este año, el inicio de un plan piloto para la implementación de una Zona Económica Especiales (ZEE) para el puerto de Chancay. El impulso de esta zona busca atraer inversión en torno a inversión privada de negocios, ofreciendo incentivos como exoneraciones de impuestos y aranceles para atraer capital, lo que generará empleo y crecimiento porque permitirá impulsar la creación de puestos de trabajo formales y el crecimiento económico en áreas que a menudo presentan rezagos históricos.
Asimismo, fomentar la productividad, desarrollando nuevas actividades económicas, mejorar la competitividad y promover la innovación. También en el ámbito de las exportaciones promueve la producción orientada hacia el mercado internacional, a menudo con procedimientos aduaneros simplificados.









