La preocupación por el cambio climático ha disminuido en gran parte de Latinoamérica, pese a un año marcado por sequías, incendios e inundaciones, según la Encuesta Global de Conciencia del Consumidor 2025 de FSC e IPSOS. A nivel mundial, la guerra y los conflictos lideran las inquietudes (52%), mientras que el cambio climático cae al 31%.
En la región, México encabeza la preocupación con 42%, y Bolivia registra solo 17%, la brecha más amplia del estudio. Solo Brasil y México muestran un aumento respecto a 2022, mientras que otros países como Argentina, Chile, Colombia y Perú reflejan un descenso en la atención pública frente a la crisis climática.
Preocupación por el cambio climático cae en América Latina
El informe subraya que los bosques son el punto donde los latinoamericanos sienten más directamente el impacto del cambio climático. La tala ilegal encabeza las preocupaciones ambientales en la región (25%), seguida por los incendios forestales y la deforestación, lo que refleja la conexión directa entre los ecosistemas forestales y la vida cotidiana de millones de personas.
“La amplia dispersión en América Latina nos muestra que la atención y el riesgo no son uniformes. Pero esto no es apatía: es una señal para actuar con pragmatismo”, señaló Subhra Bhattacharjee, directora general de FSC.
“Cuando la gente ve riesgos forestales concretos —como incendios, estrés hídrico o pérdida de biodiversidad— responde. Nuestro trabajo es hacer que la acción climática sea tangible: suministros verificados libres de deforestación, salvaguardas forestales más sólidas y resultados que las empresas puedan mostrar a sus consumidores”, agregó.
Pese a la caída en la preocupación general, la encuesta revela que los consumidores mantienen hábitos de compra responsables: el 72% en 29 mercados globales afirma preferir productos que no dañen plantas ni animales.
Además, el sello FSC continúa siendo un símbolo de confianza: México (89%), Brasil (86%) y Chile (83%) son los países donde las marcas certificadas generan mayor credibilidad, superando el promedio global del 72%.
El estudio, que entrevistó a más de 40,000 personas en 50 países, advierte que la desconexión entre la gravedad de la crisis climática y la percepción pública podría dificultar las acciones urgentes que requiere la región.
Como concluye Bhattacharjee, “el reto no es solo informar, sino demostrar con hechos que la acción climática genera resultados visibles y beneficiosos para todos”.









