Por Stakeholders
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«Nos motivó la posibilidad de aplicar nuestros conocimientos en un proyecto que no solo tenga impacto académico, sino también ambiental«, mencionó André Aldasabal, estudiante de la carrera de Ingeniería Química. Para desarrollar el proyecto, los estudiantes identificaron en el sector energético una oportunidad clave para aplicar sus habilidades en beneficio del medio ambiente y el desarrollo sostenible.
Diseño innovador y tecnología aplicada
El proyecto presentado se basa en la captura de CO2 utilizando el simulador PROMAX 6.0, una herramienta que permite modelar procesos industriales con alta precisión. En este caso, los jóvenes propusieron la implementación de un sistema de captura a base de aminas, una tecnología reconocida por su capacidad de reducir gases de efecto invernadero. «El reto fue integrar este sistema en una planta de ciclo combinado, optimizando el proceso y mejorando su eficiencia energética«, explicó Adriana Castilla.
El diseño no solo busca capturar el CO2, sino también minimizar el impacto ambiental de las operaciones termoeléctricas mediante la simulación y análisis de mejoras. La propuesta fue bien recibida en el congreso, ya que brinda una solución adaptable a diversas plantas energéticas del país, lo que podría significar un avance en la lucha contra el calentamiento global.
“Nuestros profesores nos apoyaron en todo momento, impulsándonos a explorar nuevas ideas y enfrentarnos a desafíos técnicos», comentaron los estudiantes.
Lecciones más allá del aula
Participar en un evento internacional como el COLAEIQ les permitió a los estudiantes no solo exponer su trabajo, sino también enfrentarse a un nuevo reto: presentar sus ideas ante un público profesional y de alta exigencia. «Salir de la comodidad del aula y presentarnos en un escenario internacional fue una experiencia que nos enseñó a tener más seguridad en nuestras capacidades«, destacaron
Esta experiencia, además de suponer un crecimiento personal, les permitió intercambiar conocimientos con otros profesionales y estudiantes de la región, ampliando su visión sobre los retos y oportunidades en el ámbito energético. «Atrevernos a mostrar nuestro proyecto nos abrió los ojos a nuevas perspectivas y nos enseñó que siempre hay espacio para mejorar y aprender de los demás», concluyeron.
