
A pesar de los avances en equidad de género, la brecha salarial y la baja representación femenina en cargos de liderazgo continúan siendo desafíos persistentes en el mundo empresarial. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en el 2024, la participación de las mujeres en el mercado laboral se mantiene en un 48.7%, frente al 78% de los hombres.
Uno de los indicadores más alarmantes de esta desigualdad es la disparidad salarial: en promedio, las mujeres ganan solo 51.8 dólares por cada 100 dólares que recibe un hombre. Esta brecha evidencia no solo la inequidad en los ingresos, sino también las barreras estructurales que limitan el acceso de las mujeres a oportunidades laborales y de crecimiento profesional.
En este contexto, el Día Internacional de la Mujer se convierte en una ocasión clave para visibilizar los esfuerzos de quienes están impulsando el cambio hacia espacios de trabajo más equitativos e inclusivos. En este especial, presentamos las historias de mujeres que han roto barreras y asumido el desafío de reducir la brecha de género en sus respectivas industrias.
Vanessa Moreno: liderazgo en el sector energético

Desde sus inicios en la industria energética, Vanessa Moreno desafió los estereotipos de género en un sector tradicionalmente dominado por hombres. Con formación en ingeniería electrónica y un MBA en Centrum PUCP, Moreno escaló posiciones hasta convertirse en country manager para Perú y Bolivia en Schneider Electric.
«La industria energética está experimentando un cambio con el liderazgo femenino desafiando estereotipos», señala Moreno.
El camino hacia la equidad laboral no ha estado exento de desafíos. Moreno reconoce que aún existen barreras que limitan el ascenso profesional de las mujeres, especialmente en oportunidades de desarrollo. Es por ello que en Schneider Electric, ha liderado iniciativas como el programa She4She y la ampliación de licencias de maternidad y paternidad para fomentar la equidad laboral.
Ana Claudia Quintanilla: impulsando la equidad en tecnología

Ana Claudia Quintanilla, Gerente de Regulación, Asuntos Públicos y Sostenibilidad de Telefónica del Perú, considera que la equidad de género no solo es un tema de justicia social, sino una estrategia empresarial clave.
«Los equipos diversos generan mejores ideas y se adaptan mejor al cambio», destaca. Bajo su liderazgo, Telefónica ha implementado programas como «Mujeres en Red», que ha permitido la incorporación de más de 400 mujeres en el sector técnico, y «Chicas TEC», enfocado en acercar carreras STEM a niñas y adolescentes. El impacto de estas iniciativas ha sido tangible dentro de la compañía. Actualmente, el 43% de los puestos directivos en Telefónica Movistar están ocupados por mujeres.
Giuliana Pacheco: sostenibilidad con impacto real

Con 17 años de trayectoria, Giuliana Pacheco ha construido un camino basado en la sostenibilidad y la innovación. Desde liderar una red de voluntariado con más de mil participantes hasta ser parte del equipo que creó YAPE en BCP, su carrera ha estado marcada por el compromiso con el triple impacto.
«Espero haber contribuido a que más personas comprendan la importancia de la sostenibilidad y la equidad en los negocios», afirma Pacheco, quien ha liderado la transformación cultural en diversas empresas.
Pacheco también ha liderado la transformación cultural en organizaciones con más de 100 años de historia, un reto que ha asumido con determinación. Su legado profesional se centra en construir una industria financiera más inclusiva y equitativa, donde las decisiones empresariales tengan una mirada más humana y sostenible.
María Victoria Sandoval: equidad en la gestión del talento

María Victoria Sandoval, gerente de Recursos Humanos de Arcos Dorados Perú, ha trabajado para fomentar la inclusión y equidad de género en la organización. A través del Comité de Diversidad e Inclusión, ha impulsado políticas de igualdad salarial y programas de mentoría para mujeres.
«Desde los 18 años trabajé y estudié para lograr mi independencia financiera. La perseverancia ha sido clave para mi éxito profesional», comenta Sandoval. Actualmente, el 55% de la fuerza laboral de Arcos Dorados en Perú está compuesta por mujeres y más del 80% de los restaurantes son liderados por ellas.
Keren Trapunsky: impulsando la equidad en la minería

Para Keren Trapunsky, Gerenta de Sostenibilidad y Comunicación Externa de Sierra Metals, la equidad de género es una prioridad dentro de la industria minera. Desde su rol, ha liderado la implementación de iniciativas que garantizan la equidad salarial y fomentan el liderazgo femenino dentro de la empresa. Uno de ellos es el programa ‘Mujeres Sierra Metals’, una red de soporte que impulsa la integración y desarrollo profesional de las trabajadoras dentro de la organización.
El camino de Trapunsky hacia el liderazgo no ha estado exento de desafíos. «Ingresar a una sala donde la mayoría eran hombres fue un reto, pero lo asumí como una oportunidad. Me enfoqué en demostrar con hechos mi capacidad y aportar valor desde mi experiencia», comenta. Con una trayectoria basada en la autoconfianza y el aprendizaje continuo, ha logrado consolidarse en una industria históricamente dominada por hombres.
Su compromiso con la equidad va más allá de cumplir con cuotas de género. Su historia refleja cómo el liderazgo femenino en la minería puede transformar la cultura organizacional y generar un impacto positivo en el sector.
Samantha Meyer: Los retos persisten

En Perú, solo el 15% de las empresas que cotizan en la Bolsa de Valores de Lima tienen mujeres en sus juntas directivas y apenas el 6% ocupa el cargo de CEO. Estas cifras evidencian la necesidad de seguir promoviendo iniciativas de equidad.
«Nos enfrentamos a una industria, como SIDERPERU, que históricamente ha estado más vinculada a hombres que a mujeres, pero la clave está en reforzar la creencia de que un equipo diverso tiene mucho valor», comenta Samantha Meyer, Gerente de A. Institucionales y Comunicación Externa de SIDERPERU. Para reducir la brecha de género, Meyer enfatiza la importancia de implementar políticas de reclutamiento y promoción equitativas, así como programas de capacitación y mentoría. Estas acciones no solo benefician a las mujeres en el mundo corporativo, sino que fortalecen el desarrollo de empresas más innovadoras y sostenibles.