
En un emotivo acto celebrado en Palacio de Gobierno, la presidenta Dina Ercilia Boluarte y el ministro del Ambiente, Juan Carlos Castro, resaltaron el valor del trabajo articulado con los pueblos indígenas para proteger la Amazonía. La jornada no solo sirvió para reafirmar la alianza entre el Estado y las comunidades, sino que también fue ocasión para reconocer públicamente el mérito de estos pueblos, quienes recientemente ganaron el Climate Impact Awards 2025 en la categoría de Innovación.
Este galardón, entregado en Los Ángeles, premia una iniciativa pionera en reducción de emisiones y conservación de bosques, y es la razón por la que el gobierno ha decidido otorgar una distinción adicional. “La Amazonía es la vida misma; hay que protegerla, quererla y respetarla. Trabajemos con punche para que se respete como merece”, expresó la presidenta, subrayando la importancia de la sabiduría ancestral y el rol esencial de los pueblos indígenas en el cuidado de la biodiversidad.
El ministro Castro destacó que el premio ganado por los pueblos indígenas, integrados en el Grupo Perú de Pueblos Indígenas (Anecap, Conap y Aidesep), posiciona a Perú a la vanguardia ambiental de Latinoamérica y refleja el impacto positivo de una alianza estratégica entre el Estado y estas comunidades. “La mejor forma de cuidar los bosques es generar economía local que cierre brechas de pobreza en la Amazonía, con un trabajo conjunto y sostenido”, afirmó.
Además, en el marco de este reconocimiento, se anunció un acuerdo con el Banco Mundial para financiar con US$ 14 millones el desarrollo de mercados de carbono en la Amazonía peruana, y se están explorando inversiones extranjeras de hasta US$ 750 millones para proyectos de recuperación de bosques, captura de carbono y promoción de eco y bionegocios.
Paralelamente, se firmó un convenio entre el Ministerio del Ambiente y el Gobierno Regional de Pasco para impulsar el ordenamiento territorial y la gestión sostenible de los recursos naturales. Este acuerdo, que incluye la implementación de la Zonificación Ecológica y Económica (ZEE), se suma a los esfuerzos del país para enfrentar la deforestación y preservar la biodiversidad en más de 18 departamentos.
En definitiva, la doble distinción –el premio internacional al que contribuyeron las comunidades indígenas y el nuevo convenio del Estado– es testimonio del compromiso de Perú con la protección de la Amazonía y el reconocimiento del papel fundamental de los pueblos indígenas en la conservación del patrimonio natural. Una alianza que, con visión de futuro, se erige como un ejemplo de gobernanza colaborativa en la lucha contra el cambio climático.