Informes

Geotermia, fuente de energía eficiente y sostenible para el Perú

Este recurso renovable puede atender hasta el 50 % de la demanda energética nacional; sin embargo, su desarrollo a gran escala es una tarea aún pendiente en el país.

Por Renzo Rojas

Lectura de:

La escasez de agua a partir de la falta de lluvias es una amenaza para la seguridad energética del Perú, especialmente en la zona centro y sur que dependen de centrales hidroeléctricas. Esta situación ha llevado a la quema de diesel para satisfacer la demanda energética, un recurso que es más caro y a la vez contaminante, a pesar de contar con una ingente cantidad de recursos renovables no convencionales.

Regiones como Arequipa, Tacna y Moquegua no solo cuentan con una alta radiación solar que puede ser usada como fuente de energía, sino también con un altísimo potencial de energía geotérmica que no está siendo aprovechada. Esta energía renovable, proveniente del calor interno de la Tierra, representa la enorme oportunidad de asegurar la cobertura de la demanda de electricidad de forma sostenible en el futuro.

“El sur se encuentra hoy en día en una situación de falta de energía. Siguen importándola de la parte central y dependiendo de largas líneas de transmisión. No cuentan con fuentes de generación eléctrica, lo cual limita la capacidad de desarrollo. Si vemos la seguridad energética y de suministro en la electricidad, la geotermia es un aliado estratégico para todas las regiones del sur”, señala Franklin Acevedo, especialista en energía geotérmica.

Franklin Acevedo – Especialista en energía geotérmica

La ubicación estratégica de la costa peruana en el Cinturón de Fuego del Pacífico convierte al Perú en un país privilegiado al poseer un alto potencial geotérmico. Más allá de recursos clave como las energías solar y eólica, el territorio también cuenta con otros como la biomasa y la geotermia que merecen una mayor priorización.

“En la selva tenemos el recurso de biomasa. Europa o Estados Unidos, de gran poder económico, no lo tienen. Contamos también con la sexta mayor reserva de geotermia. En el mundo solo hay 22 yacimientos geotérmicos, y el Perú tiene el sexto más grande”, indica Suamy Pérez, especialista en energía.

Potencial geotérmico

De acuerdo a un informe de la Agencia Internacional del Japón (Jica) y el Minem, se estimó que en el país existe un potencial aproximado de 3000 MW de este recurso. Franklin Acevedo menciona que esta cifra es alentadora, pero en sí no refleja la verdadera capacidad. Explica el caso del proyecto Achumani (Arequipa), para el cual este mismo estudio estimó un potencial máximo de 100 MW. No obstante, después de un trabajo de campo, se halló que su verdadero potencial era de 500 MW.

El potencial geotérmico se encuentra en todo el país. La mayor concentración de este recurso se encuentra en la zona sur. Una región de por sí volcánica como Arequipa, Moquegua o Tacna, concentra la mayor capacidad de generación de recursos. Puede decirse que la geotermia puede llegar a cubrir la demanda de energía por lo menos en un 40 % a 50 % del país”, arguye Franklin Acevedo.

Aprovechar el potencial de la geotermia se hace urgente y merece prioridad debido a la indispensable diversificación de la matriz energética del Perú. Los fenómenos climáticos han puesto en jaque a muchas centrales hidroeléctricas, aumentando los costos de generación y contaminación.

“En los últimos dos años, el Perú está atravesando por una crisis hídrica debido al cambio climático y el Fenómeno de El Niño. Antes, la matriz energética estaba conformada casi por el 50 % de hidroeléctricas. Ahora se puede llegar aproximadamente al 35 %. Esto justamente porque hay sequías y los niveles de agua no son los mismos desde hace dos años”, argumenta Suamy Pérez.

Suamy Pérez – Especialista en Energía

Estabilidad y sostenibilidad

Muy poco o casi nada se ha podido avanzar en proyectos relacionados a energía geotérmica. La causa radica en la falta de una política energética para su desarrollo, así como la falta de una visión a largo plazo, como sostiene Franklin Acevedo. Si los proyectos hidroeléctricos encontraron un respaldo en las licitaciones de ProInversión, y las energías eólica y solar en las subastas, para el caso de la geotermia no ha existido un camino claro.

“Desde mi punto de vista ha sido por un tema más de desconocimiento. Esto a pesar de que la geotermia es la única renovable que cuenta con una normativa especial y específica. No hubo un conocimiento real sobre esta tecnología; y, por otro lado, no ha existido una necesidad quizás, porque sin duda desarrollar solar y eólica es mucho más sencillo que la geotérmica. Esto ha sido un error”, afirma el especialista.

Agrega que si bien las energías solar y eólica tienen un papel muy importante, aun así se van a necesitar fuentes de energía que aseguren un suministro estable. Y es que, si bien con ambos recursos se pueden desarrollar proyectos más rápidos que con la geotermia, también debe considerarse su intermitencia en el suministro.

“Es una tecnología (geotermia) que de manera constante te puede suministrar energía, no depende de factores climáticos. Además, tiene todas las ventajas de las renovables, es limpia y sostenible. Entonces, ¿quién te puede otorgar esa seguridad o una fuente de energía de base? Únicamente la geotermia en el sur. No hay otra alternativa”, puntualiza.

Acevedo señala que una planificación de largo plazo hubiera previsto la necesidad de emplear este recurso a partir del 2024, al menos. Se debe tener en cuenta que instalar una central de geotermia toma entre 5 a 6 años, por lo que iniciar un proyecto de esta envergadura requiere de una proyección diligente.

“Si bien antes se podía decir que no había la necesidad o premura, ahora esta existe. Si hubiera existido una política pública de largo plazo, se hubiera podido determinar que era necesaria justamente en estos años, ya que habrá una urgencia de energía como se está observando hoy”, remarca.

En todo este panorama, Suamy Pérez indica que es apremiante que se lleve a un siguiente nivel el aprovechamiento de este tipo de recursos. Detalla que desde el 2019 los reportes de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade) dan cuenta de que Perú se ubica, en promedio, como el quinto país que más ha avanzado al respecto en la región. Empero, dado el potencial que presenta en energía solar, eólica, biomasa y, por supuesto, geotérmica, sorprende su menor progreso en comparación con otros países.

“Por encima está Chile, Brasil, Argentina y Uruguay. Nosotros con tantos recursos es muy poco lo que hemos hecho”, finiquita.

____________________________________

Financiamiento para la transición

Desde la incorporación de las renovables a las actividades de las empresas, Suamy Pérez sostiene que, a pesar de los bajos costos actuales, es posible que no se decidan aún incorporarlas debido a que el retorno del capital invertido es lento. En esa línea, considera fundamental contar con un financiamiento verde.

“El Perú tiene alrededor de entre 5 y 8 posibilidades de financiamiento verde dentro del sector industrial en temas energéticos. Se trata de incentivar a través de préstamos verdes o subsidios, ya que es una forma de hacer que las empresas analicen y logren la transición de sus fuentes energéticas”, subraya.

Asimismo, destaca las oportunidades que brindan la generación distribuida y la autogeneración de energía para contar con seguridad en el suministro. Finalmente, hace hincapié en las altas tarifas si no se logra la diversificación de la matriz energética.

“Las renovables son una forma de ahorro económico sobre todo para la gran empresa. Estamos en una situación en la que los contratos de electricidad hasta hace dos años eran bastantes atractivos para los clientes libres. Ahora, con todas las situaciones de la composición de la matriz energética, se genera que estos nuevos contratos sean mucho más caros a los que ya usualmente estábamos acostumbrados a tener”, concluye.




Continúa con tu red social preferida

Al continuar serás un suscriptor gratuito

O continúa tu correo.

Escriba su correo electrónico con el que se suscribió para acceder

Suscríbete

Ya me suscribí.