A pesar de los obstáculos impuestos por el Covid-19, ha tenido un desempeño fenomenal en 2021, donde se realizaron 77 operaciones que movieron 2,822 millones de dólares.
Fusiones y Adquisiones (M&A), por sus siglas en inglés, es una forma de crecimiento empresarial que resulta de la adquisición, participación, asociación o control de una empresa, empresas o activos de otras empresas, ampliando sus negocios actuales o introduciéndose en otros nuevos.
Los resultados para Perú no han sido los más esperados. Sin embargo, se estima que se pueden llegar a alcanzar los niveles de 2019 (87 operaciones, según TTR).
No obstante, para llegar a los valores de dicho periodo –e incluso, de años anteriores– se necesita una o dos transacciones de más de 1,000 millones de dólares y varias de más de 500 millones de dólares, montos que pueden darse en los sectores de minería, infraestructura o energía, normalmente complementadas por transacciones en otros sectores en las que intervienen grupos económicos locales que buscan crecer en negocios en los que ya tienen presencia importante.
Roberto Mac Lean, socio del área Corporativa de Miranda & Amado, menciona que en el pasado ejercicio el número de operaciones de M&A en nuestro país no regresó a los niveles prepandemia, pero sí mejoró respecto al 2020.
“Creemos que el efecto pandemia ha sido digerido por vendedores y compradores en lo que respecta a los valores de los negocios, no así el efecto de la situación política, lo que explica los números de transacciones y el valor de las mismas”, señala.
Y es que los resultados para nuestro país no han sido tan buenos, pero se espera tener respuestas esperanzadoras en ciertos ámbitos, como en el sector de tecnología.
“El Perú podría tener una importante explosión en transacciones pequeñas y medianas en los próximos años, como lo han tenido países como México, Chile y Colombia. Esto dependerá de cómo maduren varios proyectos de tecnología interesantes en el país”, comenta.
Además, otras actividades económicas pueden sumarse al comportamiento dinámico como la de alimentación, agroindustria, pesca y acuicultura, así como industrias alimentarias; además del sector logístico y retail, donde se verán más movimientos.
Ley de control previo
Sin embargo, estas proyecciones serán óptimas siempre y cuando Indecopi resuelva los casos presentados bajo la nueva normativa de control de concentraciones.
“En Miranda & Amado, nuestro equipo de abogados se ha venido preparando desde fines del 2020 para administrar el impacto de esta normativa, consultando con colegas de otros países de la región, especialmente de nuestro equipo Affinitas en Chile, Colombia y México, que ya tienen años de experiencia en control de concentraciones; hemos estudiado cómo impacta la normativa en los ‘due diligence’, en las negociaciones y en el cierre de las transacciones; además de la gestión de los trámites ante el Indecopi”, menciona Mac Lean.
Cabe resaltar que, en lo que va del año 2022, el Indecopi ya aprobó dos fusiones empresariales sin condiciones, pese a estar bajo el nuevo esquema de control previo. Cinco más se encuentran en trámite, según afirma la propia entidad.