Trump lanza nuevo plan arancelario con aplicación desde el 7 de agosto: países aliados logran alivios, otros enfrentan duros castigos. Más detalles aquí.

Trump anuncia un nuevos aranceles y retrasa su implementación para el 7 de agosto

Por Stakeholders

Lectura de:

En un nuevo giro de su política comercial, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este jueves la entrada en vigor de un ambicioso plan arancelario a partir del 7 de agosto, pospuesto seis días respecto a la fecha inicialmente prevista.

La medida contempla un arancel del 30% para aquellos países que no lograron cerrar acuerdos bilaterales con Washington, pero ofrece condiciones más favorables para los que sí accedieron a negociar.

Esta decisión, oficializada a través de una orden ejecutiva firmada por Trump y difundida por la Casa Blanca, aconteció horas antes del vencimiento del plazo otorgado en julio a los socios comerciales del país.

Según el documento, los países con los que EE.UU. mantiene una balanza comercial negativa enfrentarán un arancel mínimo del 15%. Esta tarifa afecta a unos 40 países, entre ellos Costa Rica, Ecuador, Venezuela y Bolivia. En cambio, para aquellos con saldo comercial positivo con EE.UU., el arancel será de un 10%.

“Hace un año Estados Unidos era un país muerto. Ahora es el más atractivo del mundo”, proclamó Trump a través de su red Truth Social, aludiendo a lo que considera una recuperación económica sostenida por la reducción de la dependencia extranjera y el fortalecimiento de la industria nacional.

Alivios para los que firmaron

La nueva política, según la administración Trump, representa un “reordenamiento justo” del comercio exterior estadounidense. Aquellos países que alcanzaron acuerdos con EE.UU. fueron beneficiados con reducciones notables en sus tarifas, en comparación con las anunciadas el pasado 2 de abril durante lo que el mandatario bautizó como el “Día de la Liberación”.

Entre los más favorecidos está la Unión Europea, que logró un acuerdo de último minuto. Sus exportaciones enfrentarán una tarifa del 15%. Corea del Sur y el Reino Unido también cerraron acuerdos, asegurando aranceles del 15% y 10%, respectivamente.

Otros países que lograron una rebaja sustancial fueron Camboya (del 49% al 19%), Lesoto (del 50% al 15%) y Vietnam (del 46% al 20%).

Los más castigados por Trump y sus aranceles

Sin embargo, no todos corrieron con la misma suerte. Tres países —la República Democrática del Congo, Guinea Ecuatorial y Suiza— no solo no lograron rebajas, sino que vieron incrementos en sus aranceles. Suiza, por ejemplo, enfrentará una tarifa del 39%, mientras que Siria, Laos y Birmania recibirán sanciones aún más duras, con aranceles de hasta 41%.

La medida también introduce sanciones que exceden los parámetros comerciales. Canadá, por ejemplo, será penalizado con un arancel del 35%, bajo el argumento de que el país “no ha colaborado lo suficiente para frenar el tráfico de fentanilo y drogas ilícitas hacia EE.UU.”. La Casa Blanca acusó además a Ottawa de tomar represalias por las políticas antidrogas de Trump.

Brasil, por su parte, enfrenta un castigo político directo. Además del arancel base del 10%, se le impuso una tarifa adicional del 40% en represalia por el juicio que enfrenta el expresidente Jair Bolsonaro, estrecho aliado del mandatario estadounidense.

México logró una prórroga de 90 días en la aplicación de las nuevas tarifas tras una conversación telefónica entre Trump y la presidenta Claudia Sheinbaum. Este aplazamiento busca “fortalecer la cooperación bilateral”, según indicaron funcionarios del Departamento de Comercio.

Un giro proteccionista reforzado

Durante una rueda de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, defendió la medida asegurando que “Trump está restaurando la soberanía económica de Estados Unidos al reducir nuestra dependencia de países extranjeros, impulsando inversiones por billones de dólares y creando cientos de miles de empleos bien remunerados”.

El anuncio se da en un momento de tensiones renovadas en la política internacional y en medio de la campaña presidencial, donde Trump busca fortalecer su base electoral con promesas de “priorizar a los trabajadores estadounidenses frente a las prácticas comerciales abusivas”.

Tregua temporal con China

Uno de los temas más delicados en el nuevo esquema comercial es la relación con China. Washington y Pekín alcanzaron un acuerdo temporal para reducir sus respectivos aranceles: EE.UU. bajará su tarifa del 145% al 30% sobre productos chinos, mientras que China reducirá del 125% al 10% los impuestos a bienes estadounidenses.

Ambas potencias han suspendido restricciones clave sobre productos como semiconductores y tierras raras, y se encuentran en proceso de negociación para lograr un pacto definitivo antes del 12 de agosto. De no alcanzarse, se podría revocar esta tregua. No obstante, Trump ha declarado que las conversaciones “marchan bien”.

Metales estratégicos y excepciones puntuales

Pese al nuevo régimen, se mantendrán vigentes los aranceles de 50% para el aluminio y el acero que Trump estableció en mandatos anteriores. A estos se sumará una tasa equivalente para productos fabricados con cobre. Sin embargo, se confirmó una excepción para los cátodos de cobre exportados desde Chile, país que figura entre los pocos exentos de los nuevos castigos arancelarios.

LEA TAMBIÉN: Los cinco empleos con mayor crecimiento hacia 2030 (y las habilidades que los impulsan)







Continúa con tu red social preferida

Al continuar serás un suscriptor gratuito

O continúa tu correo.

Escriba su correo electrónico con el que se suscribió para acceder

Suscríbete

Ya me suscribí.