
Aunque la inflación general del país se mantiene cerca del rango objetivo del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), los precios de algunos insumos básicos de la cocina peruana muestran un incremento.
Según un análisis del Centro de Investigaciones Económicas y Políticas Sectoriales y Sociales (CIEPSS) de la Universidad San Ignacio de Loyola, los productos más afectados por alzas en lo que va del año son la cebolla, el ají amarillo y la papa amarilla.
“Los productos agrícolas presentan una estacionalidad marcada. En meses donde el clima reduce la productividad de las cosechas, la oferta disminuye. Y si la demanda de hogares, restaurantes y comedores se mantiene, eso presiona los precios al alza”, explica Víctor Josué Álvarez Quiroz, director del CIEPSS de USIL.
En Lima Metropolitana, por ejemplo, el precio de la cebolla subió cerca de 9% en marzo. La papa amarilla también registró un aumento sostenido en los primeros meses del año, con alzas de más de 10% en enero. El ají amarillo, por su parte, acumuló incrementos de casi 14% entre enero y febrero. A diferencia de estos, el limón ha mostrado mayor estabilidad, con descensos recientes en sus precios.
Comparativo con 2024 y hábitos de consumo
En comparación con el año pasado, el limón y el pollo han registrado reducciones importantes de precio. En tanto, el arroz ha mostrado un alza, incluso con la importación activa del grano, mientras que el aceite vegetal presenta un leve incremento debido al encarecimiento internacional de sus insumos.
A pesar de estas variaciones, los hábitos de compra se mantienen. El pollo sigue siendo la principal fuente de proteína en los hogares peruanos, acompañado de otros productos como el arroz, las papas y algunos pescados de bajo costo.
¿Qué esperar en el segundo semestre?
Según el especialista, las proyecciones para los próximos meses son moderadamente optimistas. “El pronóstico climático indica una condición neutra respecto al Fenómeno El Niño, lo que evitaría afectaciones en las cosechas. Además, los precios internacionales del petróleo se mantienen estables a la baja. Si no se presentan disturbios o bloqueos en las carreteras, los precios deberían mantenerse relativamente estables”, indicó Álvarez.
Esta perspectiva es respaldada por los informes del INEI y otros observatorios económicos, que no anticipan variaciones significativas en los precios de los alimentos básicos durante el segundo semestre del año.