Juan Fernando Correa Malachowski, Presidente de Peruanos por Peruanos, analiza la preocupante situación de la anemia infantil en el Perú, sus consecuencias irreversibles y las acciones necesarias para combatirla. A través del programa Anemia Cero, su organización trabaja por un cambio cultural que movilice a las familias y al sector privado en esta lucha.

Por Denisse Torrico

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¿Cuál es la situación actual de la anemia en el Perú y por qué es un problema tan grave?

La situación de la anemia en el Perú es muy lamentable. Tenemos un 43% de niños menores de tres años afectados, y más del 30% en general. Este es un problema que no se entiende cabalmente. Cuando un bebé nace, su cerebro tiene solo el 25% de su tamaño final. Al año, este crece hasta el 70%, y a los tres años alcanza el 80%. Durante ese tiempo se forman billones de conexiones neuronales que dependen de una buena alimentación y de un adecuado suministro de oxígeno. La hemoglobina, potenciada por el hierro, transporta el oxígeno al cerebro y al cuerpo. Si un niño sufre de anemia durante este período crítico, el desarrollo de su cerebro se ve comprometido de manera irreversible. No hay forma de corregir esa pérdida, lo que se traduce en un menor coeficiente intelectual, menor rendimiento escolar y dificultades en la vida adulta.

¿Qué acciones considera prioritarias para combatir este problema?

El problema principal es la falta de conciencia. Necesitamos un cambio cultural urgente. La mayoría de las familias no comprende la gravedad de la anemia ni sus consecuencias. Existe la percepción errónea de que un niño «gordito» no puede tener anemia, lo cual es falso. Además de la alimentación adecuada, se deben realizar controles médicos y tratamientos cuando es necesario. Las familias no asisten a los centros de salud porque no entienden los daños permanentes que la anemia puede causar ni los beneficios de prevenirla.

¿Cuáles son los beneficios para la salud y el desarrollo de un niño al superar la anemia?

Los beneficios son inmensos. Un niño libre de anemia tendrá un mejor desarrollo cognitivo y físico, mayores oportunidades de aprendizaje, mejor desempeño escolar, y mayores posibilidades de ser un profesional o incluso un atleta destacado. Si algún día queremos ver al Perú en la final de un campeonato mundial de fútbol, necesitamos empezar por erradicar la anemia.

¿Qué es el programa Anemia Cero y cómo contribuye a combatir este problema?

Anemia Cero se enfoca en crear conciencia y movilizar a las familias y al sector privado. Organizamos ferias de tamizaje donde las madres pueden llevar a sus hijos para evaluar sus niveles de hemoglobina. Después del tamizaje, ofrecemos asesoría nutricional. También trabajamos con soluciones de agua potable de bajo costo para mejorar la calidad del agua en los hogares. Desde que comenzamos en julio del año pasado, hemos realizado 50 ferias, tamizando a más de 13,000 niños y 150 mujeres embarazadas. Nuestra campaña ha demostrado un aumento significativo en el conocimiento sobre la anemia y las acciones correctivas entre las familias que han participado.

¿Cómo pueden las empresas y los ciudadanos sumarse a esta lucha?

Las empresas pueden financiar campañas de tamizaje, beneficiando a los hijos de sus propios trabajadores, y compartir información para educar a sus empleados. También pueden promover alimentos fortificados, como el arroz enriquecido, e invertir en soluciones de agua segura. Todas estas acciones son fundamentales para mejorar la salud pública.

¿Cuáles son los objetivos de su programa para el próximo año?

Nuestro principal objetivo es generar un cambio de conciencia. Queremos llegar a más familias y sacar de la anemia a 100,000 niños. La anemia es un problema que afecta tanto el presente como el futuro del país, y necesitamos la colaboración de todos para erradicarla.







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