Por: Milagros Bracamonte
El concepto de economía circular apunta a “reducir los desechos y a promover un uso sostenible de los recursos naturales mediante diseños de productos más inteligentes, con una vida útil más prolongada, de un mayor reciclaje, y de la regeneración de la naturaleza”, precisa el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
De acuerdo con la organización, este modelo de producción, además de contrarrestar el problema de la contaminación, cumple un papel fundamental para resolver otros desafíos de gran complejidad, como el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. En ese sentido, si una empresa busca seguir creciendo, ser más competitiva y mantenerse en el mercado a largo plazo, debe empezar la transición hacia este modelo de producción y consumo.
Al respecto, Andreé Henríquez, director ejecutivo del Centro Tecnológico de Economía Circular de Chile (Circular Tec), explica que la economía circular es un medio para lograr la competitividad del negocio. “Esto no se trata de filantropía ambiental o social, sino del cómo entendemos que los negocios se desarrollan en el largo plazo para generar triple beneficio: económico, social y ambiental. La economía circular es un medio para lograr esa competitividad, por ello, debe ser un tema central en el núcleo de negocio de las empresas”.
El especialista también resalta la contribución de la economía circular al desarrollo sostenible desde un marco integral. “Además de contribuir con la protección del medio ambiente y la biodiversidad, genera empleo y mayor bienestar para las comunidades. Económicamente es uno de los elementos que ha empezado a posicionarse debido a la escasez y altos precios en las materias primas”.
Añade que, en este contexto, es importante precisar que se han venido implementando diversos impuestos o normativas legales que incrementan los costos de producción a las empresas que no contribuyen con la protección del medio ambiente y los ecosistemas. Por su parte, José Carlos Benites, presidente del Comité Especializado en Economía Circular del Capítulo de Ingeniería Ambiental del CIP Lima, comparte la perspectiva de que la economía circular impacta en los tres aspectos mencionados anteriormente. Además, resalta su potencial para la valorización de diferentes recursos.
“Este modelo de producción y consumo busca que los materiales y los productos se mantengan el mayor tiempo posible en el sistema, lo que contribuye a reducir la generación de residuos y el consumo de recursos. Agrega que implementar la economía circular en los negocios resulta beneficioso porque permite a las empresas ahorrar en costos operativos, de insumos y en disposición de residuos sólidos. “A su vez, genera empleo, ya que para conservar los productos y los materiales dentro del sistema es necesario una serie de estrategias, como la reparación y la remanufactura, que para aplicarlas necesitas mano de obra”
Transformación del modelo lineal
El especialista de Circular Tec señala que la economía circular permite a los países tener un uso más eficiente de los recursos y al mismo tiempo disminuir los impactos ambientales negativos. En ese sentido, resalta la urgencia de una transformación del actual modelo lineal que se enfoca en extraer recursos naturales, procesar, generar productos y al final verter los desechos en botaderos. “Es fundamental reemplazar el sistema para recuperar materiales y energía, con ello el funcionamiento económico será más eficiente”.
Henríquez explica que, desde el punto de vista empresarial, cuando un negocio aplica la economía circular importa menos insumos, por lo que deja de ser dependiente del comercio internacional y reduce su presión de costos como empresa. Esto es clave para mantener la competitividad.
Destaca también que empieza a ser más costoso contaminar debido al avance en las legislaciones mundiales y nacionales en temáticas como responsabilidad extendida de los productores y la restricción de cierto tipo de emisiones o componentes. “Circularizar permite estar preparado para enfrentar las nuevas legislaciones, muchas veces quedas exento de impuestos porque estás preparado como institución”.
¿Qué necesito para aplicar la circularidad?
Para que una compañía o emprendimiento reconozca la importancia de la economía circular debe conocer casos exitosos de empresas que la aplican en su modelo de negocio. En esa línea, el especialista de Circular Tec sostiene que como centro tecnológico vienen publicando una serie de videos donde se muestran casos de éxito en Economía Circular, a fin de que las empresas identifiquen el potencial de su aplicación en sus actividades respectivas.
Henríquez añade que el conocimiento técnico es fundamental si se busca implementar este modelo circular y transformar la empresa. “Debes tener capacidades técnicas y esa es una debilidad en América Latina. De nada sirve tener reportes a niveles nacionales si eso no se aplica a nivel empresarial. Ese nivel técnico puede potenciarse a nivel de universidades y formación de trabajadores”
Otro elemento clave es el acceso a financiamiento. “Es fundamental que el sistema financiero valore a aquellas organizaciones que implementan la economía circular. Esa valorización podría manifestarse con tasas diferenciadas para los créditos de las empresas que aplican la circularidad. La tasa de una empresa que tiene un compromiso ambiental no puede ser la misma que una que no es sostenible”, resalta. En tanto, el especialista del CIP señala que hay una deficiencia de conceptualización. “Hay muchas empresas que hacen economía circular, sin embargo, no la han identificado, y al no hacerlo, no pueden potenciarla. Cuando la identificas, puedes cuantificar y establecer indicadores”.
La economía circular requiere de articulación
Para José Carlos Benites Colán, la colaboración de la academia, el sector público, el sector privado, las comunidades y las ONG es clave para que la economía circular funcione. En ese sentido, explica que el rol del Estado es plantear lineamientos para que las empresas puedan ordenarse y trabajar de manera coordinada.
Agrega también que la academia muchas veces tiene soluciones simples a problemas difíciles. “Las empresas podrían impulsar foros, visitas guiadas con alumnos de los últimos ciclos para que conozcan sus plantas y se genere esa sinergia”.
Por su parte, Andreé Henríquez resalta que la participación del sector público es fundamental, ya que las empresas pequeñas y medianas necesitan los instrumentos para financiar esa transformación que se busca. Por otro lado, precisa que la economía circular y la Industria 4.0 deben ir de la mano. “El uso de la tecnología, la genética y el desarrollo de nuevos materiales es fundamental para lograr la transición hacia una economía más circular”.
La economía circular nos necesita a todos
La economía circular contribuye a que los países avancen hacia el desarrollo generando beneficios económicos, ambientales y sociales, además es una vía para lograr la sostenibilidad. Bajo ese contexto, Henríquez recalca que América Latina aún tiene mucho para crecer en estos aspectos y la economía circular es una herramienta clave. “Si logramos entender que esto no es una disputa política dentro de los países, entre la academia y el Gobierno, comprenderemos el potencial.
El desafío está en articular mejor a los actores nacionales, públicos, privados, académicos y sociales, eso nos ayudará a entender que la economía circular nos necesita a todos”, subraya. Al respecto, Benites Colán enfatiza que la economía circular hace posible el cumplimiento de algunos ODS de manera directa e indirecta, como es el caso del objetivo Hambre Cero.
“Muchas empresas y ONG a través de la economía circular trabajan para combatir el hambre con sus modelos de negocio que promueven el aprovechamiento de un producto al 100 %”. Un ejemplo de cómo hacer economía circular es el del Banco de Alimentos del Perú, quien aprovecha todas las mermas de alimentos de las empresas como Plaza Vea, Metro, entre otras, para alimentar a niños y niñas en situación de vulnerabilidad.