El último domingo, la región de Xinjiang en el noroeste de China, registró un pico de temperatura de 52,2 grados, rompiendo el récord histórico de calor para el mismo período del año. Así lo informó la Administración Meteorológica del gigante asiático. El récord anterior de Turfán, una ciudad oasis que se encuentra a las puertas del desierto de Taklamakan, se situaba en julio del 2017, cuando se alcanzaron los 50,6 grados.
Las olas de calor en estas épocas no son inusuales en China, sin embargo, el país asiático se enfrenta en los últimos meses a condiciones meteorológicas extremas, producto del cambio climático, según los científicos. En medio de temperaturas extremas estos días por todo el hemisferio norte, el emisario estadounidense para el clima, John Kerry, y su homólogo chino, Xie Zhenhua, se reunieron en Pekín, de acuerdo con información de la televisión pública china CCTV, que no brindó más detalles sobre el encuentro.
Cabe resaltar que ambos países son los que producen más emisiones que calientan el planeta, En ese sentido, el Gobierno chino afirmó que el “el cambio climático es un reto común al que se enfrenta toda la humanidad”.
China “intercambiará puntos de vista con Estados Unidos sobre cuestiones relacionadas con el cambio climático y trabajará conjuntamente para hacer frente a los desafíos y mejorar el bienestar de las generaciones actuales y futuras”, anunció la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning.
Por su parte, Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional de EE. UU resaltó que todos los países tienen la responsabilidad de reducir las emisiones. Además, instó a los gobiernos a presionar a China para que tome una acción más drástica a fin de reducir las emisiones.
La administración del presidente estadounidense Joe Biden identificó el clima como un área de posible cooperación con China, a pesar de las tensiones existentes en otros ámbitos. Para eso optó por una persona clave, ya que el ex secretario de Estado John Kerry mantiene una relación más bien cordial e ininterrumpida con China.China, el mayor emisor mundial de gases de efecto invernadero —responsables del cambio climático—, prometió alcanzar su punto máximo de emisiones de CO₂ en 2030 y después la neutralidad de carbono en 2060.
Además, el presidente Xi Jinping afirmó que su país reducirá el recurso al carbón desde 2026. “En términos de resultados concretos, algo en lo que espero que al menos se pueda avanzar es el plan de acción sobre el metano”, declaró a AFP Lauri Myllyvirta, analista principal del Centro de Investigación sobre Aire Limpio y Energía.