Han pasado más de 100 días desde que se iniciaron las protestas en contra del gobierno de Dina Boluarte y el cierre del Congreso. Dichas manifestaciones cobraron la vida de más de 60 personas y dejaron miles de heridos.
Ante esta tan preocupante situación, el Comité de Derechos Humanos de la Organización de la Naciones Unidas (ONU) emitió su informe final en el que expresa su malestar por las presuntas violaciones a los derechos humanos en nuestro país, las cuales recomienda ser investigadas de manera inmediata.
Además, exigió al Estado peruano tomar medidas para proteger estos procesos contra la impunidad y asegurar que los presuntos autores comparezcan ante el órgano judicial correspondiente, el mismo que debe ofrecer plenas garantías de independencia e imparcialidad.
Respecto a las medidas contra el terrorismo, el Comité de Derechos Humanos de la ONU exhorta al gobierno peruano a tomar medidas para “frenar la estigmatización, deshumanización y prejuicio hacia los manifestantes, líderes sociales y opositores políticos, incluso por los operadores judiciales, y poner fin al terruqueo”.
En esa línea, exigió también adoptar acciones para evitar y eliminar de manera rotunda el uso excesivo de la fuerza por los agentes del orden, incluidas las Fuerzas Armadas, sobre todo en el contexto de las manifestaciones.
Estado de emergencia
Por otro lado, la organización ha mostrado su preocupación sobre los estados de emergencia recurrentes que declara el Estado peruano y suspendido los derechos consagrados en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, considerando que estas suspensiones “solo deben suceder en situaciones excepcionales”.
El informe también señala que han visualizado múltiples denuncias de graves violaciones de los derechos humanos, como detenciones arbitrarias masivas, ejecuciones extrajudiciales, tratos crueles, inhumanos o degradantes y torturas, cometidas presuntamente por las fuerzas del orden.