Desde la aparición de la cuarta revolución, el ejercicio del comercio internacional, en pleno auge de la globalización, ha generado una competitividad jamás antes vista. Las operaciones logísticas, así como la eficiencia de las cadenas de suministro en los procesos de transporte internacional, seguimiento y localización, y eficiencias en la puntualidad de entregas busca cada día el mayor margen de eficiencia y los menores costos de producción.
Las empresas peruanas, ya sea en los rubros de exportación de bienes o servicios, no han sido ajenas al boom logístico industrial mundial. Las implicaciones tecnológicas de las operaciones logística han esculpido las principales cadenas globales de valor de nuestras mejores exportaciones; modernizando nuestros procesos, pero, también haciendo de ellos cada vez más competitivos, eficientes, productivos y beneficiosos para nuestros socios comerciales en el mundo.
No hay duda de que la digitalización, una mejor infraestructura del transporte y la sostenibilidad de nuestras exportaciones son tres de los principales desafíos del Perú para los próximos 20 años. En tal sentido, es necesario que el Estado y las empresas comprendan la importancia de la aplicación de políticas que maximicen los procesos logísticos; pero, también, guarden armonía con el planeta y el medio ambiente. Todos los tomadores de decisiones, a nivel gerencial en nuestra región, cumplen con un parámetro de búsqueda de eficacia; sin embargo, los consumidores finales cada día se vuelven más exigentes. Sus gobiernos adoptan nuevas políticas y normas para la sostenibilidad y protección medioambiental. Ellos requieren de la mejora continua de los bienes y servicios que consumen; pero, también, buscan mayores exigencias como ciudadanos libres del mundo -conscientes de las dificultades de nuestro planeta- para cautelar el bienestar de las futuras generaciones. Por tanto, una adecuada planificación y distribución logística visionaria de todas nuestras operaciones, acompañada del ahorro, la reducción de los costos y plazos logísticos, hacen necesaria la tecnificación de programas de digitalización y sostenibilidad en nuestras cadenas de valor.
Al respecto, es necesario que existan reformas públicas del Estado peruano y compromiso empresarial para acoger los beneficios y desafíos que exige la digitalización y globalización económica. Es cierto que contamos aún con una incipiente calidad de infraestructura en transporte y un empoderamiento de los servicios logísticos; sin embargo, nuestra industria aún sigue utilizando recursos fósiles, alentando el incremento de las emisiones de carbono que generan impacto en el medio ambiente, tal y como ocurre, también, en aquellos países emergentes y menos adelantados que cuentan con nuestra misma realidad socioeconómica. Por ello, la relevancia del desarrollo de políticas para la promoción de la sostenibilidad y la conservación del medio ambiente.
Finalmente, con el ánimo de formar lideres conscientes de las actuales demandas del mercado y el futuro de la integración comercial del Perú en las próximas dos décadas, la carrera de Administración y Negocios Internacionales de la UPC viene promoviendo en su oferta académica dos menciones de especialización que cubren estás necesidades. Por un lado, la mención de “Digital Business”, para que nuestros estudiantes conozcan y comprendan la importancia del uso de tecnologías como el internet de las cosas, la colaboración cibernética y los modelos de negocios basados en inteligencia artificial. Por otro, la mención de “Logística Internacional”, que contiene conocimientos teóricos y prácticos sobre la gestión de las cadenas de suministro sostenibles. Mención que, además, está certificada por Ransa S.A., empresa líder del sector de servicios logísticos del Perú y que cuenta con presencia comercial en Colombia, Bolivia, Ecuador, Honduras, Guatemala y El Salvador.