
La Universidad San Ignacio de Loyola (USIL) distinguió con el título de Doctor Honoris Causa a los embajadores Allan Wagner Tizón, José Antonio García Belaunde y Manuel Rodríguez Cuadros, destacados diplomáticos peruanos que formaron parte de la valiosa representación diplomática y jurídica en la demanda peruana ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
La ceremonia se realizó el martes 22 de abril a las 7:00 p.m. en el Aula Magna de la USIL, ubicada en el Campus Arq. Fernando Belaunde Terry de La Molina. En ella participaron embajadores, diplomáticos peruanos, políticos y empresarios, así como las autoridades, docentes y alumnos de la casa de estudios.
Como se recuerda, desde el 16 de enero de 2008, el Dr. Allan Wagner se desempeñó como Agente Diplomático Peruano ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, y lideró el caso de la demanda peruana por la controversia marítima con Chile.
El embajador Manuel Rodríguez Cuadros formó parte del equipo jurídico que defendió al Perú en La Haya, como miembro de la Comisión Consultiva Ad Hoc en la fase escrita del proceso y como abogado del Estado peruano en la fase oral. Además durante su gestión como Ministro de Relaciones Exteriores, en el 2004 inició el proceso formal con Chile, a través de una nota diplomática dirigida a la entonces Canciller de ese país, Soledad Alvear, para delimitar la frontera marítima.
Por su parte, el Dr. José Antonio García Belaunde, desde el 28 de julio de 2006 hasta el 28 de julio de 2011, fue Ministro de Relaciones Exteriores del Perú, en cuya gestión se entablo ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya la demanda marítima.
El título de Doctor honoris causa es la máxima distinción que concede la Universidad San Ignacio de Loyola a personas eminentes. Se otorga, principalmente, a personajes que se han destacado en ciertos ámbitos profesionales que no son necesariamente licenciados en una carrera.
Para la USIL es un honor distinguir a estos diplomáticos peruanos, los tres con una amplia trayectoria de servicios a las relaciones diplomáticas y el Derecho internacional de nuestro país, además de ser los responsables de defender nuestra soberanía ante La Haya.