
A finales de los años 90, Landy Ipanaque ingresó por casualidad al mundo de la gastronomía peruana. Movido por la necesidad de trabajar, ingresó como ayudante de bar a un restaurante italiano y poco a poco empezó a trabajar en el oficio que califica como uno de los más honorables y hermosos que existen en el mundo: el ser mozo. Hoy, casi 20 años después, Landy es Jefe de Servicio Corporativo de Osaka y brinda asesoría al sector gastronómico. Este experto del servicio sostiene que la cocina peruana necesita que el mozo se convierta en su socio estratégico: alguien que la difunda, la venda, la quiera y haga que el cliente la sienta como suya, incluso antes de probarla. “Lo único que nos va a convertir en el aliado incondicional de la cocina peruana es la capacitación y el personal calificado que nos capacite”.
Con estas palabras se dirigió Landy al grupo de los 24 mejores mozos premiados en Summum 2013. Como parte de la premiación a esta primera promoción de mejores mozos, VisaNet y Summum les ofrecieron una serie de capacitaciones para apoyar su desarrollo profesional. Se realizaron dos sesiones de instrucción: en la primera fecha –además de Landy, experto en servicio gastronómico- los participantes pudieron conocer a través del actor Gianfranco Brero cómo una comunicación efectiva puede mejorar la relación entre el mozo y el comensal. “Si quieres ser el mejor tienes que ser tú mismo, la imitación no funciona”, esta fue quizás el aporte más revelador para este grupo humano.
En la segunda sesión participó la reconocida enóloga Cristina Vallarino, quien enseñó los conceptos básicos del maridaje. “El mejor vino es el que más le gusta a cada persona, pero ustedes pueden ayudar a sus comensales a disfrutarlo más al saber con qué plato combinarlo y viceversa. Disfrutaremos de una mejor cena si nos recomiendan el vino adecuado.”
Otras historias que inspiran
Entre los asistentes a las capacitaciones, se encontró Raúl Nicacio de Wa Lok, el mozo que obtuvo el primer lugar en la categoría de mozos en Summum 2013. Nico, como lo conocen sus amigos, recomendó a sus colegas dar lo mejor de cada uno para que puedan sobresalir con su servicio. “Con el movimiento del restaurante a veces damos por sentado nuestro trabajo, yo me di cuenta que lo hacía cuando empezaron las evaluaciones con la encuesta de VisaNet y dar lo mejor de mí me permitió ser reconocido junto a colegas que yo admiro a nivel profesional.”
Uno de los que colegas de los que hace referencia Nico es Marco Tantachuco, de La Gloria, quien obtuvo el tercer lugar. “Llevo trabajando en el sector gastronómico casi 30 años, no se trata de una profesión, un trabajo que realizamos de manera mecánica. Nuestra profesión requiere pasión y vocación para ofrecerle al comensal lo mejor de nuestra comida y de nuestro servicio”.
Dentro del grupo de reconocidos en el 2013 como los mejores mozos, se encuentran también Jesús Fuentes y Segundo Hoyos, de La Perroquet, que obtuvieron el noveno y décimo puesto respectivamente. “El trabajo de mozo nos brinda muchas satisfacciones a nivel personal”, cuenta Fuentes, mientras que su compañero entre risas explica que la distinción que recibieron de Summum y VisaNet los ha hecho famosos en el restaurante del Country Club Lima Hotel. “Hemos recibido clientes que piden sentarse en nuestra zona porque nos reconocen y quieren ser atendidos por nosotros”, cuenta un orgulloso y emocionado Hoyos.
Finalmente, VisaNet invitó al grupo de mozos reconocidos a participar también este año en la encuesta “Evaluación de Mozos” que está activa en los POS de los restaurantes participantes y que premiará en agosto a la segunda promoción de los mejores en el ranking Summum 2014. “Ustedes son los representantes del sector porque son los mejores en su trabajo y permitirán que nuestra gastronomía sea reconocida como una experiencia: no solo se come rico sino se brinda la mejor atención”, apuntó Analía Ferrero, Jefe de Marketing y comunicaciones de VisaNet.