“Cada donación de sangre y plasma es un regalo valioso y fundamental para mantener un suministro adecuado” fueron las palabras del Director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), doctor Jarbas Barbosa.
En marco del Día Mundial del Donante de Sangre, la entidad se unió a esta celebración bajo el lema «Dona sangre, dona plasma, comparte la vida, compártela frecuentemente», iniciativa que muestra la importancia de donar voluntariamente sangre y plasma a fin de contar con un suministro seguro y sostenible
En América Latina y el Caribe la tasa promedio de donación de sangre por cada 1.000 habitantes es de 15 unidades, sin embargo, algunos países se sitúan por debajo del mínimo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que es de 10 unidades de acuerdo con cifras de la organización.
En muchos países de la región la demanda supera la oferta, y los servicios de sangre, especialmente en los países de ingresos bajos y medianos, enfrentan el desafío de asegurar el acceso a sangre segura y de calidad.
Respecto a las donaciones de plasma obtenidas mediante la extracción de sangre, la OMS ha resaltado la necesidad de aumentarlas en muchos países con el objetivo de garantizar suficientes proteínas plasmáticas para los pacientes. Esto es vital para tratar una variedad de enfermedades graves, como la hemofilia, enfermedades inmunitarias, infecciones y trastornos graves.
Sin embargo, la escasez de plasma en muchos países de ingresos medianos y bajos limita el tratamiento correcto de pacientes. A nivel mundial, se han identificado solo 44 países, seis de ellos en América Latina y el Caribe, que usan el plasma donado para producir derivados plasmáticos como inmunoglobulinas y factores de coagulación, considerados medicamentos esenciales de acuerdo con la OMS.
Cabe resaltar que la disponibilidad de sangre o plasma beneficia a todos los pacientes, sobre todo a aquellos que requieren de apoyo transfusional de por vida, o periódicamente. Este es el caso de los pacientes con anemia falciforme o talasemia, o aquellos con otras afecciones crónicas, como hemofilia, pacientes oncológicos o inmunosuprimidos.
En ese sentido, el doctor Barbosa recalcó la importancia de que más personas se conviertan en salvadores de vidas ofreciéndose como voluntarios para donar periodicamente sangre o plasma.
La transfusión de sangre representa una medida vital en el tratamiento de múltiples enfermedades y trastornos médicos, otorgando una segunda oportunidad y mejorando la calidad de vida a las personas.