Por Stakeholders
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Un grupo de niños y niñas del albergue disfrutaron de esta experiencia única al aire libre y en contacto con la naturaleza, desarrollado en los jardines que forman parte del Puericultorio Pérez Araníbar.
Esta actividad realizada gracias a la iniciativa de la Gerencia de Servicios a la Ciudad y Gestión Ambiental de la Municipalidad Metropolitana de Lima, resulta realmente beneficiosa y cobra mayor relevancia en momentos en que el confinamiento a causa de la pandemia es parte de las medidas de restricción adoptadas para evitar los contagios.
Manos a la obra
Usando algo de material reciclado y mucha creatividad, la primera actividad designada en esta jornada, fue encargarles la tarea de realizar una manualidad y así, a través de: «Creando nuestra ave favorita», nuestros niños y niñas desplegaron toda su creatividad y el arte que poseen para inspirarse y usando su imaginación, crear lindos muñequitos alados. Este fue un momento que disfrutaron con particular entusiasmo al dar rienda suelta a su inventiva y dejar volar su imaginación, al tiempo que se iban familiarizando con el equipo especializado a cargo del taller.
Ya en el campo de acción, nuestros niños recibieron las primeras instrucciones y los materiales necesarios para el avistamiento y la recopilación de datos que obtendrían. Una libreta o Bitácora de aves, que les serviría para anotar y dibujar lo que vieran y muy importante, estar tranquilos, hablar en voz baja y mantener la vista atenta y la concentración, imprescindibles para la observación de los detalles y características de las aves.
La Ruta del Avistamiento
Tres fueron los puntos designados. La Rotonda, el patio de juegos y una zona cercana al huerto del hogar. Ya en la ruta designada para el avistamiento de aves, la experiencia sería única y muy gratificante para ellos. El reconocimiento de distintas especies teniendo en cuenta el plumaje o canto de estas, entre otros detalles se dieron ante sus atentas miradas y así poniendo en práctica las recomendaciones de sus instructores y aplicando lo aprendido previamente, lograron el objetivo deseado. Esta actividad, dirigida a cargo de una experta ornitóloga, fue sin duda una enriquecedora experiencia para nuestros niños.
La observación de aves puede ser una de las actividades más relajantes al aire libre y se realiza especialmente en primavera y otoño, época en que pueden ser vistas en mayor número ya que debido al cambio de clima, diversas especies migran de norte a sur y viceversa, buscando donde anidar.
Además de fortalecer las capacidades de los niños en el reconocimiento de la diversidad de aves urbanas y su importancia para el ecosistema, crea conciencia sobre la necesidad de contribuir con la conservación de la biodiversidad y los ecosistemas urbanos en Lima y suma a fomentar el cuidado de la naturaleza; árboles y aves a través de actividades de reciclaje.
