Por Stakeholders
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En estos últimos años, las Empresas B han asumido la responsabilidad de construir un futuro más justo, equitativo y regenerativo para todas las personas y el planeta, usando la fuerza de su negocio para hacer el bien. Son empresas que miden y gestionan su impacto social y ambiental. Están certificadas internacionalmente por B Lab y en Perú son promovidas por Sistema B.
Esta tendencia a nivel mundial tiene como objetivo centrar “la acción colectiva” de las empresas privadas para catalizar el desarrollo en distintos territorios económicos. “Para lograr tener la certificación de Empresas B se realiza una medición y análisis de las cinco áreas más relevantes de la empresa: Gobernanza, Trabajadores, Clientes, Comunidad y Medio Ambiente. El objetivo es alcanzar un triple impacto, es decir, social, ambiental y económico”, detalla Mariale Soto, Directora Ejecutiva de Sistema B Perú.
En el Perú, existen más 50 Empresas B, desde turismo (5), finanzas (3), logística (1), construcción (2), textil y joyería (8), cosmética y cuidado personal (2), manufactura y hogar (1), servicios profesionales y estrategia corporativa (12), agricultura y alimentación (8), gestión ambiental (4), salud y bienestar (3), educación (1), tecnología (1), de las cuales emplean a más de 5 mil trabajadores y suman ingresos colectivos anuales por 1059 billones de dólares.
En el país empresas como Natura, SIDERPERU, Virutex Ilko, Libélula, Höseg, Atrevia Comunicación, la Universidad Continental y más se han unido a las tendencias del mercado global que tiene como estructura el beneficio del planeta y quienes lo habitan para lograr un ecosistema sostenible.
El apoyo a la comunidad y crecimiento profesional
Desde la llegada de la certificación de Empresa B, las organizaciones han tratado de brindar las mismas oportunidades generacionales, es por ello que, de acuerdo con el informe de impacto de Sistema B Perú más del 50% de mujeres ocupan algún cargo de gerencia en las Empresas B peruanas. Sin embargo solo 16 de las 50 Empresas B son lideradas por mujeres, “lo cual, es una oportunidad de mejora para el Movimiento B de nuestro país y en lo que deseamos trabajar para los próximos años.
Su compromiso con el medio ambiente:
En el Perú, el 56% de estas empresas cuentan con un programa formal para evaluar cómo reducir la generación de residuos sólidos peligrosos y no peligrosos. También, el 14% utiliza al 100% energías de fuentes renovables. Además de ello, el 63% monitorea y registra el consumo de agua para que no sea malgastado, es por ello que el 32% (de los 63%) ya se han establecido metas de reducción para los próximos años.
La fidelidad a sus colaboradores:
Pese a la inflación y la incertidumbre a nivel global, el 85% de estas empresas en el país otorgan beneficios financieros adicionales a sus trabajadores en puestos no ejecutivos y oportunidades de participación societaria. En esa misma línea, el 88% de las empresas ofrece programa de seguro de salud con atención médica a sus empleados.
A nivel mundial son más de 7,300 empresas en 93 países que conforman el universo de Empresas B. Estas empresas, cumplen un rol esencial en el Perú al promover la sostenibilidad, la transparencia y la creación de valor compartido. Su influencia no se limita a sus propias operaciones, sino que también inspira a otras empresas a adoptar enfoques similares.
