Por Stakeholders

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La sostenibilidad impactará significativamente a la industria de la moda. Esta es una conclusión a la que llegó el banco de inversión Morgan Stanley, tras una encuesta realizada a 10 mil consumidores en todo el mundo. A pesar de que actualmente todas las miradas están puestas en la crisis causada por el COVID-19, el consumo y la apuesta responsable de los usuarios priorizará este enfoque.

“Aunque en el momento actual es complicado mirar más allá del COVID-19, creemos que los inversores no deben perder de vista el creciente impacto que el consumo sostenible tendrá en la industria de la moda en los próximos años”, sostiene el estudio publicado en la web Modaes.es.

Sin embargo, este impacto en la industria de la moda se verá reflejado en la reducción del sector  y una menor rentabilidad para los próximos años. “La industria de la moda simplemente se hará más pequeña”, a la vez que “en el largo plazo, podría tener un impacto significativo en el poder de generación de beneficios del sector”, señala el banco de inversión.

La encuesta reveló que 70% de los consumidores prefieren el uso de ropa sostenible. No obstante, solo 20% de ellos pagaría el precio por estos productos. Asimismo, otro dato importante es que dos tercios de los sondeados han iniciado o planean conseguir ropa con mayor costo y duración, lo que es para ellos una manera de ser responsables.

“Lo que es quizás más preocupante para los retailers de moda es que, en todos los países analizados, simplemente comprar menos artículos se considera la forma más popular de hacer que la compra de ropa sea más sostenible”, enfatiza este informe.

Por otro lado, los resultados no permiten indicar que la actual pandemia acelerará la incorporación de la sostenibilidad a los negocios, pero Morgan Stanley está convencido de que será así.

“Desde que desarrollamos el informe, el mundo se ha visto abrumado por el Covid-19 y nuestro equipo de retail cree que proporcionará enormes desafíos para la industria de la moda en los próximos dos años, y actualmente es difícil mirar más allá de ellos”, explica.

Y es que, definitivamente, las medidas que vienen estableciendo los Gobiernos para evitar mayores contagios dificultarán el proceso de compra y venta de ropa. Por ejemplo, aplicaciones al mercado como el distanciamiento social impedirán que el usuario tenga una experiencia agradable, por lo que habrá efectos nada favorecedores en la demanda.

El estudio de Morgan Stanley así lo señala: “la reapertura de las tiendas en las próximas semanas será meramente el final del principio del impacto del Covid-19 en la industria del retail (…) las tiendas no sólo serán más costosas de mantener para los retailers, sino que habrá un impacto directo en la demanda”.

En ese sentido, el banco de inversión hizo un llamado a los inversionistas en estas circunstancias, que trae consigo, por así decirlo, un aspecto bueno e innovador: la sostenibilidad. “Los inversores deben estar preparados para que el Covid-19 actúe como acelerador de un consumo más sostenible”, indica el informe.

Sobre la encuesta

El sondeo fue realizado en el mes de febrero del presente año. Los elegidos fueron 10 mil consumidores (entre 16 y 60 años de edad) distribuidos equitativamente en cinco países: China, India, Estados Unidos, Reino Unido y Alemania. Además, se contó con Alphawise para consultarles  a los encuestados sobre cuestiones ambientales y sus hábitos de consumo.

Precisamente, de los países encuestados se calcula que los consumidores en cada uno de ellos adquieren entre 28 y 38 prendas de ropa, calzado u otros accesorios anualmente. “Desde un punto de vista demográfico, aún hay una tendencia en todos los países de que las generaciones más jóvenes son las que más compran cada año”, muestra el informe. Por otra parte, los consumidores de la India son los que más compran y los de Reino Unido menos.







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