“Esta es una actividad que buscamos sea permanente en esta comunidad. No es posible que estas familias convivan con los desechos y parte fundamental de la iniciativa es generar conciencia en las personas, a fin de que seamos responsables y se gestione debidamente los residuos sólidos, evitando posibles enfermedades y la contaminación del río, que todo lo lleva finalmente al mar”, señaló Úrsula Carrascal, vicepresidenta de la ONG Vida.
Wilson Valles y Demer Ramírez, dirigentes de la comunidad shipiba del asentamiento humano desde hace 12 años, mostraron su satisfacción por el apoyo de la institución para mejorar la calidad de vida de los cerca de 2 mil habitantes que viven en Cantagallo.
Provistos de guantes, gorras, polos y bolsas, alrededor de 50 pobladores de todas las edades, conformaron brigadas de voluntarios para recolectar desechos de plástico, madera, metal, entre otros, información que fue sistematizada en los formularios que llenaron a medida que cumplían con su tarea de limpieza.
“Esta es la primera jornada de limpieza en esta zona. Es un acto que va más allá de lo simbólico: es una muestra de lo que la propia comunidad puede hacer por sí misma, en salvaguarda de su salud, especialmente de los muchísimos niños que juegan en medio del basural. Y, finalmente, es un acto solidario pues evitando echar desperdicios al río se lucha contra la contaminación marina”, añadió Úrsula Carrascal.
La Campaña Internacional de Limpieza de Costas y Riberas – Perú 2011, arrancó el pasado 17 de setiembre, en cuya jornada inaugural se recolectó 90 toneladas de residuos sólidos en 16 puntos del país donde se realizó (desde Paita hasta Ilo y en el pueblo de Machu Picchu). Cuenta con el respaldo de la Marina de Guerra del Perú, Dp World, Repsol La Pampilla, Sociedad Nacional de Pesquería, las APROs y Coca Cola. Playa “Carpayo”, en El Callao, resultó ser la más contaminada con más de 30 toneladas de desperdicios recolectados en dicha jornada.