Por Stakeholders
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Culminó la quinta edición de CADE por la Educación 2013, iniciativa de IPAE Acción Empresarial, que durante dos días consecutivos congregó a más de 350 empresarios y líderes de opinión con el fin de reflexionar y tomar acción sobre el rol que debe asumir hoy en día el sector empresarial en la educación, así como examinar posibles soluciones para resolver la brecha entre la oferta educativa superior y las demandas del mercado laboral.
Marina Bassi, Especialista Senior en Economía de la Educación en la División de Educación del Banco Interamericano de Desarrollo – BID en Washington, señaló que América Latina en general aún no ha podido mejorar la productividad laboral a través del capital humano. Prueba de ello, son los resultados de la última prueba PISA realizada por la OCDE en el 2009, que revela que el estudiante de América Latina no es capaz de utilizar conocimientos académicos básicos para resolver situaciones cotidianas de la vida real. En el caso de Perú, los resultados estuvieron por debajo de la región, ubicándose en el puesto 63 de 65 países del mundo. Entre las principales razones figuran el abandono escolar y la desconexión entre las habilidades que desarrollan las escuelas y las que requieren las empresas, principalmente las habilidades blandas o socioemocionales –es decir, habilidades específicas/técnicas, de conocimiento y de comportamiento.
En este sentido, Bassi recalca que es vital repensar el modelo de la escuela para el mercado laboral actual involucrando en el sistema alianzas público-privadas, logrando que el sector productivo asuma un papel protagónico, siendo el Estado el responsable de crear estándares y supervisar el sistema, así como buscando mayor movilidad entre estudios post-secundarios y el trabajo, es decir, evitando un modelo educativo que termine al completar la etapa escolar.
Por otro lado, Ian Vásquez, director del Centro para la Libertad y la Prosperidad Global del Cato Institute, comentó que llama mucho la atención que la educación en el Perú sea tan deficiente cuando, según el FMI, el crecimiento económico peruano es uno de los más altos de la región e incluso para el próximo año se proyecta alcanzar el mayor crecimiento de Sudamérica.
“Estamos en el siglo XXI con un modelo educativo del siglo XIX y esto no es un problema de modelo, es el sistema del monopolio estatal que no está funcionando bien en todo el mundo. Lo que el Perú necesita es un cambio fundamental: de Estado docente a sociedad docente”, señala Vásquez.
Otro tema importante considerado en esta quinta edición de CADE por la Educación fue cómo las nuevas tecnologías de la información están revolucionando el sector, sesión que fue presidida por Carmen Rosa Graham, miembro del Comité Organizador de CADE por la Educación 2013. En ésta se destacó la necesidad de romper paradigmas para generar una educación de calidad, cambiar los roles de docentes a facilitadores, hacer uso de nuevas herramientas para el aprendizaje donde se integren las nuevas tecnologías de la información y estas sean experimentadas continuamente; innovación en los dispositivos de formación, mayor conectividad, etc.
Asimismo, en esta sesión se comentó que, gracias a la revolución de las nuevas tecnologías en la educación, hoy los alumnos pueden desarrollar y fortalecer competencias acordes a lo que requieren las empresas, formas de pensar que incluyen un pensamiento crítico, creativo, con capacidad de resolución de problemas y capacidad de toma de decisiones; formas de trabajo más interactivas, donde se resalta la comunicación y colaboración; nuevas herramientas para trabajar como las TIC’s; interculturalidad, y las habilidades para la vida en el mundo, la ciudadanía, la vida y la carrera, y la responsabilidad personal y social.
La Universidad Corporativa de Intercorp; el proyecto Escuelas Exitosas que viene ejecutando IPAE en las zonas rurales; el programa de Enseña Perú; Innova Schools son algunas de las iniciativas exitosas y replicables que ya están contrarrestando esta problemática y que fueron analizadas a lo largo de este CADE.
Conclusiones
Entre las principales conclusiones de CADE por la Educación 2013, su presidente Luis Bustamante indicó que se debe trabajar en encontrar una convergencia entre los objetivos y las expectativas de los empresarios y las instituciones académicas en este tema, actualmente no relacionados entre sí.
Asimismo, señaló que es necesario trabajar en el desarrollo de un observatorio educativo que ofrezca información confiable y oportuna sobre los requerimientos del mercado laboral y las alternativas brindadas por el mercado educativo. En este sentido, IPAE Acción Empresarial, a través de su presidenta, Susana Eléspuru, anunció la creación de este observatorio, que promoverá la articulación de la demanda laboral y la oferta educativa. Una de sus primeras acciones será la realización de una encuesta nacional de la demanda de profesionales y técnicos requeridos por parte de las empresas que permitan identificar los perfiles ocupacionales más demandados y competencias claves requeridas, para poder analizar la brecha existente y poder atacarla de manera focalizada.
Las entidades educativas no solo deben asegurar la mejora continua de la calidad de sus servicios, así como el desarrollo de habilidades blandas que permita aprovechar mejor el talento de los estudiantes, Bustamante señaló que debe exhortarse a los centros académicos y al empresariado a acercarse con el fin de lograr una mayor, mejor y oportuna empleabilidad de los estudiantes, ya que ello redundará en beneficio del país.
Finalmente, comentó que la iniciativa privada debe buscar abrir caminos y romper paradigmas, no solo mirando lo que hace el resto del mundo, sino conectándose con este para identificar o replicar modalidades y experiencias innovadoras y accesibles que ya hayan demostrado ser realizables y sostenibles con un alto impacto en beneficio de la sociedad.
