Según el último Informe de Planeta Vivo, el principal análisis científico de WWF sobre las tendencias de la biodiversidad y la salud de la Tierra, en los últimos 50 años las poblaciones de flora y fauna silvestres han descendido en un promedio de dos tercios de su totalidad.
Este hecho amenaza todo lo que nos rodea: el clima, las fuentes de alimentación, el agua dulce y, por supuesto, la salud.
Lambertini fue determinante en su discurso al pedir que todos los actores involucrados se unan para tomar las medidas respectivas frente a la crisis mundial del clima y la naturaleza, así como para garantizar un futuro sostenible.
“Junto con los gobiernos, las empresas y las comunidades, tenemos que lograr más en los próximos 10 años que lo que hemos conseguido en los últimos 60”, manifestó.
La evidencia más reciente de que la actividad humana insostenible está haciendo un uso desmedido de los sistemas naturales, hasta llevarlos al límite, es la pandemia ocasionada por la COVID-19. Problemas como la deforestación, el comercio de animales silvestres y el descontrolado aprovechamiento de la tierra son las raíces de esta crisis.
El director general de WWF también aseguró que esta década debe ser un punto de inflexión, en la cual el desarrollo sostenible se convierta en una norma. Afirmó que en la actualidad la relevancia de la misión de WWF ha crecido desde que se fundó en 1961.
“Hoy sabemos que solo podemos tener un futuro seguro, próspero, saludable y equitativo para la humanidad en un planeta bien cuidado”, mencionó.
Por su parte, Pavan Sukhdev, presidente de WWF Internacional, señaló que «tenemos que aprovechar las numerosas y diversas relaciones, y el vasto conocimiento que hemos construido a lo largo de estos 60 años, y aplicarnos con mayor vigor para innovar y colaborar en la creación de soluciones a los complejos desafíos actuales. No hay tiempo que perder».
Los 60 años de WWF
La organización se ha mantenido pionera en algunas de las iniciativas más innovadoras en el ámbito de la conservación de la naturaleza. Entre los esfuerzos mundiales que ha realizado, muchos continúan vigentes hasta el día de hoy.
Por ejemplo, el apoyo a la creación de áreas protegidas mundialmente famosas, como las Galápagos en Ecuador y los Parques Nacionales de Volcanes en Ruanda. Asimismo, también han promovido la conservación de especies animales en peligro de extinción, tales como los pandas, tigres, elefantes, rinocerontes, entre otros.
A lo largo de su trayectoria, han abordado una gran cantidad de retos ambientales a través de su red mundial, siempre guiados por la ciencia. Elaboraron las primeras ecoetiquetas en el mundo creadas para alimentos y productos de consumo, así como también apostaron por la adopción de acuerdos globales que busquen cuidar y preservar recursos naturales.
A sus 60 años, WWF se ha convertido en una organización global multicultural de liderazgo y operaciones locales. Se encuentra activa en aproximadamente 100 países y es apoyada por más de 35 millones de personas en el mundo. A través de la voz y el compromiso de todos los seguidores, buscan crear un mundo más justo, sano y sostenible para la conservación del mundo natural y el bienestar de las personas.
Lambertini asegura que el gran impacto de WWF ha sido posible por la colaboración de los numerosos socios y simpatizantes con los que cuenta la organización. De igual manera, el director general rescata la unión de fuerzas que han tenido con los movimientos ambientales como parte del éxito de muchas labores.
«Nuestro viaje está lejos de haber concluido. En los últimos 60 años el mundo ha sufrido profundas transformaciones y WWF también. Una cosa que no ha cambiado es nuestra resolución y determinación de contribuir a un futuro en el que las personas y la naturaleza prosperen. La ciencia nunca ha sido más clara y nunca habíamos sido tan conscientes. Nuestra sociedad está lista para el cambio. Juntos podemos hacerlo», concluyó Lambertini.