Por Stakeholders
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La Universidad Católica Sedes Sapientiae (UCSS) construyó un nuevo campus sostenible, ubicado en Chulucanas (Piura), que permite mitigar las altas temperaturas de la región. El diseño arquitectónico cuenta con su propia planta de tratamiento de aguas servidas y fue fabricado con sus propios ladrillos de adobe.
“La concepción de la construcción del campus siempre partió del respeto al medio ambiente. El primer desafío fue realizar un diseño y ejecución sin perjudicar a los árboles y mantener el bosque de algarrobos que se encuentra alrededor del campus, evitando la tala indiscriminada de especies protegidas. Asimismo, se diseñó la cimentación evitando intervenir las aguas subterráneas”, explicó Carlos López, arquitecto del proyecto.
Si bien para la edificación del proyecto se utilizaron una mezcla de materiales modernos con otros de la zona, se aprovecharon las propiedades del adobe como aislante y térmico en beneficio de la comunidad universitaria. Y es que la elección de materiales ancestrales como conexión con la gente de la región también fue tomada en cuenta en la sostenibilidad del proyecto.
“En el terreno donde se edificó el campus se encontró tierra de muy alta calidad para la elaboración de ladrillos de adobe, que se trabajaron con los artesanos locales, logrando un muy buen producto para la construcción. Se trata de un material totalmente natural y ancestral de la zona”, explicó el arquitecto.
De otro lado, el diseño arquitectónico contempla el trabajo de sombras y orientaciones para el confort interno de los ambientes, los cuales se trabajaron con estructuras metálicas y carpintería de madera. Así, se logró mantener la temperatura fresca a pesar del intenso calor de Chulucanas, que puede superar los 35 grados.
El nuevo campus de la UCSS en Chulucanas también cuenta con una planta de tratamiento de aguas servidas para el riego del mismo terreno, completando así exitosamente el ciclo de uso del recurso hídrico, pues permite el autoabastecimiento para la sostenibilidad de la sede universitaria.
“En una zona rural como Chulucanas, la UCSS realizó importantes esfuerzos para respetar el ecosistema, diseñando un adecuado plan integral que partió desde la obtención de la habilitación urbana del predio. Se tomó en cuenta el equilibrio del bosque, el tratamiento paisajístico, se incluyó un manejo eficiente del agua y desagüe, con un drenaje pluvial”, explicó el especialista.
