Entre 3.300 y 3.600 millones de personas son altamente vulnerables a los impactos del cambio climático, según las Naciones Unidas (ONU). Y es que la ruta hacia la neutralidad de emisiones a la atmósfera para 2050, con miras a reducir el calentamiento global, se ha visto ralentizada con la guerra de Ucrania.
Si bien durante la pandemia se redujeron las emisiones de dióxido de carbono (CO2), meses después volvieron a aumentar. En ese sentido, los científicos del sexto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas (IPCC), Paola Arias y Juan Rivera, han coincidido en la necesidad de incrementar los esfuerzos para lograr combatir este problema.
Arias señaló que se requiere «incrementar las inversiones en adaptación, porque se ha invertido menos en adaptación que en mitigación” y eliminar los combustibles fósiles, a pesar de los «intereses petrolíferos», como en los países dependientes de esos ingresos. Propuso aumentar la reforestación y eliminar los malos usos del suelo, como la aplicación de pesticidas o químicos.
Por su parte, Rivera consideró importante «proteger a las pequeñas islas del Pacífico, que se verán severamente afectadas por los desastres naturales por la subida del nivel del mar y dejarán migraciones masivas».
Además, recalcó la necesidad de imponer impuestos a las empresas más contaminantes y ampliar el apoyo para una transición energética a las energías renovables. «Necesitamos que se generen mecanismos para acelerar la reducción en las emisiones de gases de efecto invernadero”, comentó.
Cambio Climático: ¿Cómo combatirlo?
Según el portavoz de cambio climático de Greenpeace España, Pedro Zorrilla, para evitar que los gases sigan dañando el planeta existen dos vías. La primera es a través de las COP (Convenciones de Cambio Climático), con las que llegar a acuerdos internacionales. La segunda es “que los países más ricos financien proyectos de energías renovables en aquellos que están en vías de desarrollo».