Este lunes, los 27 países miembros de la Unión Europea (UE) aprobaron una normativa que endurece los estándares de calidad del aire, estableciendo límites más estrictos para contaminantes como las partículas en suspensión PM10 y PM2,5, el dióxido de nitrógeno (NO₂) y el dióxido de azufre (SO₂). Además, se ha aprobado el derecho de los ciudadanos a reclamar y recibir indemnizaciones si su salud se ve afectada por la contaminación del aire, siempre que exista una infracción de las nuevas normas.
La nueva normativa establece que los países de la UE tendrán un plazo de dos años para adoptar estas regulaciones y asegurar que los niveles de contaminación se ajusten a los estándares antes de 2030. Actualmente, se estima que alrededor de 300,000 personas mueren cada año de forma prematura en Europa debido a la mala calidad del aire, una situación que las nuevas medidas buscan revertir.
Metas de largo plazo para mejorar la salud
Con la mira puesta en alcanzar un nivel de contaminación cero para 2050, la UE ha optado por un enfoque gradual para la reducción de contaminantes. Entre los principales cambios, los valores límite anuales para PM2,5 pasarán de 25 microgramos por metro cúbico (µg/m³) a 10 µg/m³, y para NO₂ se reducirán de 40 µg/m³ a 20 µg/m³. Estas reducciones se alinean mejor con las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que busca proteger la salud pública ante la exposición a estos contaminantes.
Además de ajustar los límites, la directiva revisada requerirá la creación de hojas de ruta de calidad del aire antes de 2030 si se detecta el riesgo de que no se alcancen los nuevos objetivos. Estas hojas de ruta establecerán planes concretos para cumplir con los estándares en cada país, permitiendo una respuesta rápida y adaptada a las necesidades locales.
Acceso a la justicia y compensaciones por daños a la salud
Una de las innovaciones más destacadas de la nueva directiva es la garantía de un acceso justo a la justicia para las personas afectadas. A partir de ahora, los ciudadanos europeos que sufran problemas de salud derivados de la contaminación atmosférica, y que puedan demostrar que las normativas han sido violadas, tendrán el derecho de reclamar indemnizaciones. Esta medida busca fomentar un mayor compromiso por parte de los Estados miembros en la aplicación de las regulaciones y promover una responsabilidad compartida en la lucha contra la contaminación.
Aunque la calidad del aire en Europa ha mejorado en los últimos 20 años, aún no alcanza niveles considerados seguros por la OMS. Con estas medidas, la UE se compromete a una mayor protección de la salud de sus ciudadanos y a reforzar su lucha contra la contaminación atmosférica, preparando el camino hacia un futuro más limpio y saludable.