
Leopoldo Monzón Ugarriza
Gerente General PROESMIN
Los últimos años, los proyectos mineros en etapa de exploración y explotación, han sido objeto de discusión por los altos riesgos que presentan en lo ambiental y social. Es por tal motivo, la población peruana duda de la minería debido a que la transparencia y la información que circula son medias verdaderas, muchos mitos y más falacias que se tejen alrededor de esta industria. Lo cierto y comprobado es la cuantiosa cantidad de ingresos que la actividad minera ha generado y lo poco que ha transformado en infraestructura y empleo productivo en los lugares donde se desarrollan estas actividades. El verdadero desarrollo sostenible involucra un nuevo modelo social, donde la empresa y la población, logran generar acuerdos y compromisos que a la larga tienen que cumplirse definitivamente. Es por tal motivo, que planteamos las siguientes medidas para asegurar un nuevo giro a la situación actual, considerando el levantamiento de información realizado por PROESMIN en más de 30 minas en operación:
- Importante capital de riesgo en las etapas previas a la construcción (Prospección y Exploración)
- Proceso largo y burocrático asociado a los trámites
- Adecuado nivel de carga impositiva (Regalías, impuesto a la renta)
- Poco de desarrollo económico alrededor de las actividades mineras
- Impactos ambientales generados
- Poca infraestructura desarrollada en las cuencas mineras
- Demasiadas áreas denunciadas en función a las que se explotan
- Alta percepción de la población en general que la minería contamina y que no genera desarrollo
- Generación de empleo de forma directa e indirecta: pobladores interesados en la generación de empleos
Ante lo expuesto proponemos una serie de medidas en paralelo a la línea de tiempo a un proyecto minero:
- Facilidades a la prospección y exploración casi sin restricciones; aprobación inmediata de estas actividades mediante declaración jurada y un compromiso de remediar cualquier impacto que pueda originarse.
- Para la etapa de construcción de la mina, implementar como mínimo en las cuencas intervenidas: sistemas de almacenamiento de agua, sistemas de riego, potabilización de aguas para consumo humano, tratamiento de aguas residuales, construcción de carreteras y vías; todo esto asegurará empleo y será una condición inobjetable para la licencia social. El financiamiento de estas actividades corresponderá al estado las mismas que serán pagadas con el adelanto de las regalías y el canon que se origine; para estos fines existen bancos e instituciones financieras interesadas en generar un fideicomiso para llevar adelante estas actividades de forma inmediata.
- En los primeros años de explotación, se implementará toda la infraestructura educativa, de salud y, el financiamiento será el mismo al anterior, pero recurriendo a los fondos que se generaran a mediano plazo en los proyectos (5 años).
- Durante todo el proceso, desde la prospección hasta la explotación, debe haber un monitoreo continuo del medio ambiente.
En relación a lo planteado, las empresas mineras deben tener un compromiso con los pobladores en el siguiente sentido: si se cumple con los acuerdos expresados, cualquier reclamo efectuado de forma injustificado que atente contra la infraestructura estatal o privada, será penado respecto a la ley inmediata; en caso contrario, los pobladores podrían solicitar una acción directa de ejecución sobre los puntos que no se hayan cumplido en los compromisos adquiridos.