Toyota Motor Corporation (Toyota) y BMW Group (BMW) afianzaron su colaboración a través de la firmar de un acuerdo que busca fortalecer la colaboración en el sector del hidrógeno, con el objetivo de crear una sociedad del hidrógeno y lograr la neutralidad de carbono en general. Ambas compañías trabajarán juntas en el desarrollo de sistemas de celdas de combustible y en la mejora de la infraestructura.
Ambas compañías firmaron un acuerdo en diciembre de 2011 para establecer una relación de cooperación a medio y largo plazo en tecnología medioambiental, y han impulsado conjuntamente el desarrollo de tecnologías medioambientales, incluidas las celdas de combustible y los vehículos deportivos, durante más de una década. Al compartir una visión común de «hacer realidad una sociedad del hidrógeno«, las dos compañías seguirán acelerando la innovación tecnológica en sistemas de celdas de combustible.
1. Las dos compañías ofrecerán una gama más amplia de opciones a los clientes al equipar más automóviles de pasajeros con sistemas de celdas de combustible.
Toyota y BMW están colaborando en el desarrollo de un sistema de celda de combustible de tercera generación, que se instalará en los modelos de ambas compañías para ofrecer a los clientes una gama más amplia de vehículos eléctricos de celda de combustible (FCEV). Como primer paso, BMW planea lanzar su primer FCEV de producción en serie en 2028.
Adicional a ello, también trabajarán para crear sinergias mediante la colaboración en el desarrollo y la adquisición, así como para reducir los costos mediante la fusión de unidades de propulsión para expandir la demanda de vehículos comerciales y de pasajeros. Al hacer que los FCEV sean una opción más accesible, la asociación contribuirá a la creación de una sociedad del hidrógeno.
2. Establecer redes de suministro de hidrógeno sostenibles
Ambas empresas creen que trabajar con socios afines es esencial para hacer realidad una sociedad del hidrógeno. Dada la necesidad de crear núcleos de demanda de hidrógeno en las primeras etapas de su popularización, Toyota y BMW fomentarán el suministro de hidrógeno sostenible creando demanda y trabajando en estrecha colaboración con empresas productoras de hidrógeno, así como con instalaciones de distribución y reabastecimiento para garantizar un suministro estable de hidrógeno y reducir los costos.
Koji Sato, presidente de Toyota, resaltó: «Estamos encantados de que la colaboración entre BMW y Toyota haya entrado en una nueva etapa. En nuestra larga historia de colaboración, hemos confirmado que BMW y Toyota comparten la misma pasión por los automóviles y la creencia en la «apertura tecnológica» y un enfoque de «múltiples vías» para la neutralidad de carbono. Basándonos en estos valores compartidos, profundizaremos nuestra colaboración en esfuerzos como el desarrollo conjunto de sistemas de celdas de combustible de próxima generación y la expansión de la infraestructura, con el objetivo de hacer realidad una sociedad del hidrógeno. Aceleraremos nuestros esfuerzos junto con BMW y socios de diversas industrias para hacer realidad un futuro en el que la energía del hidrógeno apoye a la sociedad».
Por su parte, Oliver Zipse, presidente del Consejo de Administración de BMW AG, comentó: «Este es un hito en la historia del automóvil: el primer vehículo de celdas de combustible de producción en serie que ofrecerá un fabricante premium global. Impulsado por hidrógeno e impulsado por el espíritu de nuestra cooperación, subrayará cómo el progreso tecnológico está dando forma a la movilidad futura. Y anunciará una era de demanda significativa de vehículos eléctricos de celdas de combustible«.
Cabe resaltar que, Toyota ha posicionado al hidrógeno como una fuente de energía clave en sus esfuerzos por lograr la neutralidad de carbono y ha estado impulsando iniciativas en colaboración con muchos socios en las áreas de «producción, transporte, almacenamiento y uso» del hidrógeno.