Por Stakeholders
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Desde que inició la pandemia, Caja Piura entregó S/ 400 millones en créditos de fácil acceso a los emprendedores y brindó capacitaciones en educación financiera a 4597 personas para ayudarlos a mantener en pie los negocios de todo el país durante la etapa más difícil de la crisis sanitaria.
Como aliado del crecimiento y desarrollo de los pequeños negocios, Caja Piura comprendió la necesidad de los emprendedores de adaptarse a los nuevos hábitos de consumo que impuso la pandemia. Brindó capacitaciones a personas dedicadas a la pastelería, agricultura y ganadería para que aprendan a organizar sus finanzas, implementen estrategias de inversión y se inserten en el mundo digital.
“Tenemos presencia en todo el país y pudimos llevar educación financiera a las zonas rurales, enseñando a pequeños empresarios no solo a elaborar un control de los ingresos y gastos, sino también a ahorrar y hacer buen uso del crédito”, sostiene Mercedes Franco, Presidenta del Directorio de Caja Piura.
Seis de cada diez emprendedores que confían en Caja Piura se dedican al comercio, transporte y agricultura, sectores esenciales que no pudieron parar durante la peor etapa de la pandemia. “A ellos se les brindó el capital para continuar sus negocios y enfrentar la reducción de sus ingresos ante el deterioro de la economía del país”, recuerda Franco. En total, fueron 1’005,000 créditos entregados con este fin.
Caja Piura también buscó promover los programas de financiamiento que ofrecía el Estado como son REACTIVA PERU, PAE MYPE, FAE AGRO. El crédito que apoyó a los comerciantes fue el FAE MYPE, y pudimos otorgar más de 21 mil créditos a los microempresarios.
Pero Caja Piura fue más allá. “Nos preocupamos por crear el crédito CONTIGO MYPERÚ, un producto ideal para nuestros 198,000 clientes emprendedores que los benefició hasta con S/ 95 mil soles y les ofreció condiciones flexibles de pago hasta por 36 meses”, señala la ejecutiva.
La microfinanciera también generó iniciativas para beneficiar a sectores específicos de la comunidad empresarial. Caja Piura puso por delante a los 713 comerciantes que laboran en los diferentes mercados de Piura y les brindó facilidades como reprogramaciones, ampliaciones de créditos y plazos de pago y reducción de tasas de interés. Esto les permitió seguir adelante con la venta de verduras y abarrotes, actividad que aseguró el abastecimiento de alimentos para miles de hogares, y que nunca se detuvo en la crisis de salud que vivimos.
“En Caja Piura estamos convencidos que la micro y pequeña empresa (mypes) es el motor económico de la región y del país. A menudo se trata de emprendimientos familiares o con amigos, a quienes les ayudamos no solo a emprender sino a apoyarlos y actualizarlos en su estrategia de venta e incluso impulsarla para llegar a diversos territorios”, concluyó la ejecutiva de la institución.
