
Olas Perú, fundada en 1992 y dirigida por el destacado entrenador Roberto Meza, se convirtió en la primera escuela del mundo en obtener la certificación Carbono Neutral. Este logro refleja su liderazgo no solo en la formación de campeones mundiales, sino también en la promoción de prácticas sostenibles.
La certificación, otorgada tras un riguroso proceso de medición y compensación de su huella de carbono, fue celebrada en una ceremonia en el Palacio Municipal de Miraflores, distrito conocido como Surf City por su relevancia turística y deportiva.
Entre los asistentes destacaron figuras como Joel Koechlin, presidente de CANATUR; Luis Miguel “Magoo” de la Rosa Toro, entrenador del Team Perú; Luciana Visneski, directora general de Green Initiative; y Maree Ringland, embajadora de Australia.


Un compromiso concreto con la acción climática
El camino hacia la certificación Carbono Neutral de Olas Perú implicó un proceso exhaustivo de medición de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) generados durante el 2023. Este análisis abarcó aspectos como el transporte de personas y materiales, y el uso de recursos en sus operaciones.
Siguiendo estándares internacionales como la norma ISO 14064-1:2018 y el Protocolo de Gases de Efecto Invernadero (GHG Protocol), la escuela identificó y cuantificó sus emisiones en toneladas de dióxido de carbono equivalente (tCO₂e). Posteriormente, las emisiones inevitables fueron compensadas mediante la adquisición de Certificados de Emisiones Reducidas (CERs), provenientes de un proyecto de energía renovable en India validado por las Naciones Unidas.
“Este reconocimiento no solo nos llena de orgullo, sino que nos compromete a seguir liderando desde el surf la lucha contra el cambio climático”, señaló Roberto Meza, gerente general de Olas Perú y embajador de la World Surf City Network.
Surf y sostenibilidad: un ejemplo para el mundo
El logro de Olas Perú no es un hecho aislado, sino parte de una visión integral que combina la promoción del surf con un compromiso ambiental tangible. Como líder en la formación de tablistas, la escuela busca inspirar a las nuevas generaciones no solo a conquistar olas, sino también a proteger los ecosistemas que hacen posible este deporte.
El próximo desafío de la escuela es implementar medidas de mitigación a largo plazo que permitan reducir aún más su huella de carbono. Entre las estrategias contempladas se incluyen la adopción de energías renovables, el uso de transporte sostenible y la educación ambiental para sus estudiantes y colaboradores.