Los empaques flexibles son el método más económico para empacar, conservar y distribuir alimentos, bebidas y otros productos que necesitan una vida útil más larga, en la industria alimentaria. Sin embargo, por su bajo costo y alta funcionalidad, se utilizan para todo, desde fruta fresca hasta carne, alimentos secos, dulces, bebidas, productos de cuidado personal, artículos de papelería, herramientas, productos electrónicos, entre otros. Sin embargo, estos productos son de un solo uso o desechables, con muy poco reciclaje, además, son el segmento de mercado más desafiante para abordar el camino de una economía circular para los plásticos.
En respuesta a la creciente preocupación por la contaminación derivada de los residuos sólidos, Nestlé Perú ha venido intensificando sus esfuerzos en la materia de sostenibilidad, ahora, con un enfoque especial en la gestión y aprovechamiento de los empaques flexibles.
“Hoy, se marca un hito. Hasta el momento no existía una infraestructura de reciclaje en Perú capaz de proporcionar una dirección práctica para los envases flexibles”, señaló Javier Texido, gerente general de Nestlé Perú. Con el compromiso de abordar esta problemática de manera efectiva, Nestlé Perú anunció la firma de un convenio con Sinba que permitirá mejorar la infraestructura, tecnología y cultura de reciclaje mediante la instalación de una planta de recuperación y valorización de plásticos complejos de reciclar, tanto rígidos como flexibles.
“Hay plásticos que son reciclables – como las botellas- y es porque hay una infraestructura para poder reciclarlos; sin embargo, en el caso de embalajes flexibles – que son los empaques que tiene Nestlé: galletas, chocolates, helados – por sus características de composición de los diferentes tipos de plásticos y láminas, son de difícil reciclabilidad. Además, no hay una industria detrás que los recicle, entonces, son empaques que tienden a quedarse en el medio ambiente”, agregó Javier Texido.
De acuerdo con Javier Texido, a nivel nacional se producen al menos 44 mil toneladas de embalaje flexible al año, de las cuales más de 2000 toneladas son de Nestlé. “Esta infraestructura aportará al 15 % de reciclaje del embalaje flexible producido por Nestlé, y si funciona exitosamente además de que las cifras incrementarán, otras compañías se podrán sumar.
Por su parte, Pipo Reiser, gerente general y cofundador de Sinba, precisó que el objetivo del convenio es desarrollar una planta que será incorporada a un Centro de recuperación de materiales denominado Centro Inclusivo de Recuperación Circular (CIRC), la cual ayudará a transformar plásticos que en el Perú son difíciles de reciclar – como los empaques flexibles, además, no tienen una industria de reciclaje. “Con este proceso lograremos transformar los empaques flexibles en un material que se asemeja a una tabla, versátil y duradero y sobre todo que es hecho de 100 % de plástico reciclado y es 100 % reciclable.
La firma del convenio, llevada a cabo el jueves 01 de febrero de 2024, marca un antes y después en la lucha contra la contaminación por residuos plásticos en el país. Este acuerdo establece las bases para un proyecto conjunto que se enfocará en la gestión y aprovechamiento de empaques flexibles, abordando de manera directa la falta de infraestructura de reciclaje para estos materiales en el Perú.
Nestlé Perú se establece como la primera empresa de consumo masivo en liderar soluciones concretas ante la problemática de los plásticos, demostrando su compromiso ambiental, a través de un enfoque de Creación de Valor Compartido. “Nos embarcamos en un trayecto hacia la regeneración, dando un paso más allá. Este convenio no solo enfrenta los desafíos de los empaques flexibles, sino que también subraya el compromiso de Nestlé en la búsqueda constante de soluciones innovadoras para el reciclaje de diversos materiales”, añadió Javier Texido, gerente general de Nestlé Perú.
“Hoy, se marca un hito. Hasta el momento no existía una infraestructura de reciclaje en Perú capaz de proporcionar una dirección práctica para los envases flexibles”.
“El proyecto propone implementar una iniciativa pionera. Su objetivo principal es acelerar y fomentar la recuperación de residuos plásticos diversos, transformándolos en materias primas de alta calidad. Estas materias primas se utilizarán en la fabricación de productos versátiles y duraderos, contribuyendo así a cerrar el ciclo de vida de los empaques flexibles”, indicó Pipo Reiser, gerente general y cofundador de Sinba.
La firma del convenio contó con la presencia de representantes clave de ambas organizaciones, destacando la importancia estratégica de esta alianza. Nestlé Perú y Sinba marcan un paso fundamental hacia un futuro más sostenible para nuestro país.
Envases flexibles serán convertidos en materiales de construcción
La economía circular busca maximizar el valor de los recursos mediante su reutilización, reciclaje y renovación. En lugar de seguir un modelo lineal de “extraer, fabricar, usar y desechar”, la economía circular promueve la idea de mantener los productos, componentes y materiales en uso durante el mayor tiempo posible, minimizando así la necesidad de nuevos recursos y reduciendo la presión sobre los ecosistemas naturales.
En este sentido, Nestlé en su compromiso con la economía circular tiene como objetivo que esos envases flexibles, sean transformados en materiales similares al ladrillo a fin de que puedan utilizarse para la construcción. “Para lograrlo contamos con el Centro Inclusivo de Recuperación Circular (CIRC), una planta de recuperación de material reciclado a través de la cual los recicladores que vienen por décadas trabajando en este rubro podrán comercializar los productos que recuperarán a través de un modelo de comercio justo”, explicó el gerente general de Sinba.
Gracias a esta iniciativa de Nestlé y Sinba, los recicladores tendrán el beneficio de los Sinba puntos – que son como los puntos bonus del reciclaje-, donde además de recibir un buen pago, obtendrán puntos que podrán canjearse por productos o servicios que los ayudarán a trabajar de manera más segura, con asesoría contable, asesoría legal, o lo necesario para lograr la formalidad y la profesionalización.