Junto a FIFARMA se presentó un estudio donde se señala la necesidad de invertir en salud para aportar al crecimiento económico del país y el bienestar de la población.

El evento contó con la presencia de Ángela Flores, Directora General de ALAFARPE, Berenice Rodríguez de City Manager Arequipa, Ana Gabriela Silva, Directora General de DIGEMID y Rafael Cortez, Porfesor e Investigador de la Universidad del Pacífico.

Por Stakeholders

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La Asociación Nacional de Laboratorios Farmacéuticos (ALAFARPE) y la Federación Latinoamericana de la Industria Farmacéutica (FIFAFARMA) presentaron hoy en el Swissotel los resultados del 1er Simposio de Inversión en Salud y cómo el bienestar influye en el desarrollo económico y social del Perú mediante la productividad de la población.

El estudio fue elaborado por el vicedecano de Economía de la Universidad del Pacífico Pablo Lavado y destaca la necesidad de invertir en salud no sólo por el bienestar de la sociedad, sino para aportar al PBI del país y sus economías familiares. Dentro de los análisis se analizó como los diagnósticos y tratamientos de enfermedades como la hipertensión arterial, la diabetes mellitus y la depresión pueden ayudar a los pacientes a recuperar la productividad.

En el primer caso se halló que la Tasa Interna de Retorno por persona es del 59, con lo cual la mejora en la productividad del paciente supera lo invertido en su diagnóstico y tratamiento. Al medir en términos de aporte total a la economía represente más de 28 mil millones de soles.

En el caso de la diabetes, la Tasa Interna de Retorno es del 52% con un aporte de 16 mil millones de soles. Finalmente, en la depresión alcanza el 95% con un aporte de más de 612 mil millones de soles. En los tres casos no sólo aporta a la economía familiar y calidad de vida del paciente, sino que es rentable para el estado el invertir en el diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades.

«Invertir en salud hace que aumente la productividad no solo por ser un derecho, sino para salir adelante en sus hogares y como país» afirmó Pablo Lavado en su intervención.

Por su parte Miguel Figaldo, Director de Proyectos de APOYO Consultoría, señaló que «cuando somos pacientes afrontamos distintas brechas. Perú está detrás de la región frente a países como Colombia y Chile. Hay que mejorar el cuidado y la salud reduciendo el impacto presupuestal por paciente a causa de la escasez del presupuesto».

Los retos y oportunidades para la salud en el Perú

Según el estudio, el Perú se encuentra por debajo del promedio de la región con 37% de puntuación mientras que la media regional es del 45%. A su vez, la obtención de dispositivos médicos también es bajo a causa de que, desde 1980, se han aprobado 22mil registros sanitarios cuando en Ecuador y Colombia son 99.000 y 45.000 respectivamente.

Esto se debe a que, según Miguel Figallo, el tiempo para incorporarse al petitorio de EsSalud es de 8 años para los aceleradores lineales y 11 para equipos de hermodiálisis en el caso diabético.

Para ello, dentro de la presentación hubo una mesa redonda que contó con la presencia de Ángela Flores, Directora General de ALAFARPE, Berenice Rodríguez de City Manager Arequipa, Ana Gabriela Silva, Directora General de DIGEMID y Rafael Cortez, Profesor e Investigador de la Universidad del Pacífico.

«Una vez que accedan al tratamiento hay que buscar un lugar donde albergar al paciente y su familia. El tratamiento es largo, costoso e incluye a toda la familia. En regiones el sólo tener una consulta ya es un privilegio» señaló Berenice respecto a las consultas en provincias, donde hay una mayor dificultad para acceder a servicios de salud en enfermedades como cáncer, hipertensión y diabetes.

También mencionó que uno de los aspectos que se debe trabajar es en la confianza y que el sector público no es el único en esta tarea. «Hay que tener el apoyo social a causa del abandono que tienen los pacientes a nivel nacional. Hay que acompañar a esta persona en los cuidados. Es un camino largo y complicado de entender cuando no se ha transitado, pero es indispensable trabajar en los puntos señalados» sentenció.

Por su parte Ángela Flores quiso destacar el papel del sector privado en la mejora de la salud, señalando que «se puede aplicar obras por impuestos, proyectos de infraestructura y mejoramiento para acortar las brechas. Este modelo de aterrizar la red permite el intercambio de tecnologías duras y blandas». afirmó.

Finalmente Rafael Cortez destacó tras su experiencia que las entidades fundamentales que se necesitan para las reformas se basan en dos modelos, los cuales son una rectoría fuerte y el rol del sector privado, tal como funciona en los sistemas de salud coreano y el inglés.

«Lo que han hecho es juntar el fondo de salud único manejado por el estado y no sólo de impuestos, sino también del sector privado. Con ese dinero se regula y pone rectoría, controles de calidad, deciden qué comprar y son responsables de separar el rol de financiamiento y producción. La combinación da una sostenibilidad financiera» sentenció.







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