POR VERÓNICA ROCA-REY – Gerente de Responsabilidad Social y Relaciones Públicas del BCP
En el Perú, más de 9 millones de personas sufren problemas relacionados a la salud, alimentación y educación, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Las cifras son inquietantes: desde el 2022, el 36,2% de los peruanos tiene un déficit calórico en su alimentación; el 31,2% enfrenta problemas de salud sin atención médica; y el 33,6% de estudiantes de primaria tiene retraso escolar.
En este contexto, al ser uno de los grupos más afectados, los jóvenes están mostrando verdadero interés por sumarse al desarrollo de la sociedad y, así, acelerar los cambios que la región necesita. Por ello, es crucial que las instituciones públicas y privadas aborden los problemas que afectan la calidad de vida en la región de la mano de las nuevas generaciones, que poseen el potencial para transformar el presente con liderazgo y propuestas creativas.
Debemos escucharlos y hacerlos protagonistas porque el futuro es suyo y tienen el potencial de representar el cambio que la región demanda. En Credicorp queremos contribuir a acelerar este proceso y, por ello, hace dos años creamos el programa VOCES de Credicorp, para recoger ideas que, empuñando la digitalización, impacten en mejorar el acceso a los servicios de salud, educación, alimentación, entre otros. A través de esta iniciativa nos hemos propuesto reconocer a los individuos que con esfuerzo buscan encarar los desafíos de la región.
En la última edición se recogieron cerca de 2700 ideas presentadas por 5515 jóvenes de Colombia, Chile, Bolivia, Panamá y Perú. Este resultado da cuenta de su preocupación por aportar propuestas innovadoras con soluciones tangibles y sostenibles. Los proyectos finalistas y ganadores fueron el reflejo de las grandes capacidades de esta generación, del poder que tienen para sentar las bases de un futuro con una mejor calidad de vida para nuestra comunidad.
Nuestro país se vio representado por Bruna Mora, una de las ganadoras de VOCES por el Bienestar con el proyecto ‘Tolki’. Esta iniciativa nació como respuesta a la creciente demanda de atención a la salud mental, y ofrece sesiones accesibles y rápidas para enfrentar la escasez de especialistas en Latinoamérica. Además, tuvimos ‘Handy’, una idea de Javiera O’Ryan de Chile, consistente en un dispositivo de inteligencia artificial que ayuda a traducir la lengua de señas a audio (y viceversa). Asimismo, estuvo ‘Acorazonando la Vida’, idea de Almudena Rinco, de Colombia, que ofrece una escuela virtual para desarrollar habilidades psicológicas en niños y adolescentes.
Es importante, sin embargo, tener en cuenta que las ideas son apenas el punto de partida para las acciones. Y pasar del dicho al hecho demanda el trabajo conjunto, no solo de los gobiernos y las instituciones públicas, sino también de toda la sociedad. El primer paso es escuchar las ideas y ofrecer una plataforma para que sean expresadas, lo que sigue demanda el esfuerzo de quienes toman las decisiones. A eso tenemos que llegar para que las iniciativas revolucionarias, como las que acoge VOCES por el Bienestar, desemboquen en una sociedad con más y mejores oportunidades para todos.