Múltiples hallazgos en el lago Crawford, en Canadá, revelan que ya empezó el Antropoceno, una nueva época geológica que en comparación a todas las anteriores, es provocada por la actividad humana.
Los investigadores descubrieron sedimentos con restos de microplásticos, cenizas depositadas por la combustión de petróleo y carbón durante décadas, plutonio de lejanas explosiones nucleares y nitrógeno del aumento del uso de fertilizantes.
La historia del planeta Tierra, de 4.600 millones de años, se divide en eras, períodos, épocas y edades geológicas. Hasta ahora, la comunidad científica ha definido que estamos en la era Cenozoica, período cuaternario, época del Holoceno.
Sin embargo, los actuales hallazgos realizados por el Grupo de Trabajo sobre el Antropoceno (AWG, por sus siglas en inglés) revelan que las alteraciones del medioambiente provocadas por el ser humano han llegado a los lugares más ocultos del planeta, por lo que se ha disparado la nueva época y puesto fin al Holoceno, que empezó hace 11.700 años.
«El registro en Crawford Lake es representativo de los cambios que hacen que el tiempo desde mediados del siglo XX sea geológicamente diferente al anterior», comentó la científica de la tierra Francine MG McCarthy, miembro del AWG, que ha investigado desde 2009 cómo delimitar esta nueva época.
Si la comunidad científica valida el inicio del Antropoceno, la humanidad se situaría en un momento histórico en la línea de tiempo de la Tierra.
Otras épocas trascendentales para el planeta y la vida fueron el Cámbrico (era Paleozoica), el Jurásico y el Cretácico (era Mesozoica).
¿Qué es el Antropoceno?
También conocido como «época de los humanos”, este concepto fue propuesto por primera vez en 2002, por el Nobel de Química Paul Crutzen, que estimó que podía aplicarse desde mediados del siglo XX, período que coincide con el incremento de la concentración de gases de efecto invernadero, la contaminación por microplásticos, los residuos radiactivos de los ensayos nucleares y otra docena de marcadores de la creciente influencia de nuestra especie en el planeta.
Por tanto, confirmar la presencia del Antropoceno nos obliga a reflexionar sobre estos impactos, provocados por la humanidad.
Para Crutzen, el concepto y la realidad del Antropoceno debe ser considerado un grito de alerta sobre los desafíos que se avecinan.