El Gobierno turco ha ordenado la detención de 113 personas al ser consideradas responsables del derrumbe de edificios por no cumplir con los requisitos impuestos por la ley contra sismos.
Esto quedó al descubierto tras los terremotos ocurrido en Turquía y Siria, los cuales revelaron que hay múltiples edificios con infraestructuras deficientes.
Por su parte, el vicepresidente turco, Fuat Oktay, explicó que hasta el momento se había identificado a 131 sospechosos como responsables de la caída de algunos de los miles de edificios destrozados en las 10 provincias afectadas por los temblores del lunes pasado.
Además, agregó que se hará un seguimiento minucioso hasta finalizar el proceso judicial necesario, sobre todo para los edificios que sufrieron graves daños, causando muertos y heridos.
Por otro lado, diversos expertos aseguraron que, pese a que los sismos fueron potentes, los edificios pudieron haberse salvado si se construían de forma correcta.
«La intensidad máxima de este terremoto fue violenta, pero no suficiente para derribar edificios bien construidos«, aseveró David Alexander, catedrático de Planificación y Gestión de Emergencias del University College de Londres.
Añadió que, en la mayoría de los lugares, el nivel de sacudida fue inferior al máximo, por lo que se puede comprobar que de los miles de edificios que se derrumbaron, una gran parte no cumple ningún código de construcción antisísmica.
Incumplimiento de la normativa de construcción
Las normas de construcción fueron fortalecidas en Turquía tras catástrofes anteriores, como la del 2018.
También se incluyeron disposiciones de seguridad más radicales tras el terremoto de 1999, en el que perdieron la vida 17 mil personas.
Las normas actuales exigen que las estructuras de las regiones sísmicas utilicen hormigón de alta calidad reforzado con barras de acero. Las columnas y vigas también deben estar distribuidas de manera que absorban de manera eficaz el impacto de los seísmos.
El gobierno ha otorgado «amnistías de construcción» periódicas -en la práctica, exculpaciones legales con el pago de una tasa a diversas estructuras construidas sin los certificados de seguridad exigidos.
Estas amnistías evidencian un riesgo de catástrofe en caso de un terremoto de gran magnitud.
Al menos 75 mil edificios destruidos por el terremoto en Turquía obtuvieron estas amnistías, según Pelin Pınar Giritlioğlu, responsable en Estambul de la Cámara de Urbanistas de la Unión de Cámaras de Ingenieros y Arquitectos de Turquía.
25 mil edificios derrumbados
El ministro de Medio Ambiente, Murat Kurum, detalló que al menos 24 mil 921 edificios en toda la región se derrumbaron por el terremoto ocurrido el pasado 6 de febrero.. Estos datos se obtienen de un informe que ha analizado más de 170 mil edificios de las zonas dañadas.
Por otro lado, los equipos de salvamento continúan buscando sobrevivientes entre los escombros del terremoto.
El número de muertos se ha elevado a 28 mil y se sospecha que aumente aún más. Según la ONU la cifra total de muertos superaría las 50 mil personas.
Críticas al presidente Erdogan
Los partidos de la oposición culparon al gobierno del presidente Tayyip Erdogan por no hacer cumplir las normas de construcción que se impusieron tras el terremoto de 1999. Sus detractores aseguran que Erdogan ha malgastado los impuestos especiales que también se instauraron tras el citado sismo y que estaban correspondían a la construcción de edificios resistentes a los terremotos.