Por Stakeholders
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Un nuevo informe de la OIT expone el desarrollo de la equidad laboral de género y revela un 16,4 por ciento de tasa de desocupación por parte de las mujeres, durante la emergencia sanitaria por la Covid-19.
La crisis provocada por la pandemia ha significado un gran desafío en la lucha por la igualdad de género. En plena emergencia en muchos hogares la mujer ha seguido asumiendo ciertos roles domésticos asociados a su género.
Evidentemente, esto ha significado un gran retroceso en la lucha por la igualdad; y ha tenido impactos negativos en la situación laboral de las mujeres.
De acuerdo con el reciente informe de la Organización Internacional de Trabajo (OIT), de los 23,6 millones de puestos de trabajo de mujeres que se perdieron durante los inicios de la pandemia, aún faltan por recuperar unos 4,2 millones. Mientras que, en el caso de los hombres se han recuperado por completo 26 millones de puestos. .
Vinícius Pinheiro, director de OIT para América Latina y el Caribe, indicó que las mujeres y los hombres deben plantearse retos de cara a superar las brechas existentes.
“Este 8 de marzo en el Día Internacional de la Mujer debemos tener muy en cuenta que enfrentamos un retroceso preocupante en la igualdad de género en el trabajo, y por lo tanto la región necesita redoblar esfuerzos para recuperar el terreno perdido y generar más y mejores oportunidades laborales para las mujeres”, dijo Pinheiro.
Además, es necesario que las mujeres se empoderen en este mes y tomen conciencia de las grandes limitaciones pasadas, pero que sobre todo se reintegren a participar de las decisiones políticas, públicas, y de ciudadanía, agregó. En el informe también se señala la falta de participación de ellas en la toma de decisiones políticas.
La nueva nota técnica de la OIT destaca que la tasa de participación regional de las mujeres que rondaba 41 % a comienzos de los años 1990 había subido en forma constante hasta 52,3 % en 2019 (promedio de los primeros tres trimestres). En 2020, en ese mismo período bajó a 47 % aunque ese año el promedio regional descendió hasta el 43 %.
Por último, el documento resalta la importancia del fortalecimiento de las capacidades de las mujeres para desarrollar sus condiciones para la empleabilidad, y la reconversión y adaptación de sus capacidades para ingresar al mundo de la economía digital.
