La desalinización del agua es un proceso que se remonta a la época de los filósofos presocráticos. Se trata de un proceso físico-químico a través del cual se trata el agua del mar o agua salobre para convertirla en agua potable. Esta labor se realiza en plantas desalinizadoras, que se ubican de forma estratégica para abastecer las necesidades de un núcleo urbano. No obstante, poner en marcha este tipo de infraestructuras tiene un coste muy alto, por lo que su instalación se recomienda especialmente cuando no hay una fuente de agua dulce accesible.
Las plantas desalinizadoras más grandes del mundo
Actualmente Arabia Saudí, es uno de los países pioneros en desalinización de agua del mar. En este país cuatro de cada cinco litros que se consumen provienen de plantas desalinizadoras. Los siguientes países en la lista son Emiratos Árabes, Libia, Kuwait, Qatar, Estados Unidos, Japón y España.
Dos de las plantas desalinizadoras más grandes del mundo se encuentran en Israel, un país donde los recursos hídricos son escasos, limitados y se encuentran en continuo descenso. También es un país azotado por la escasez de lluvia, un problema en el que el cambio climático tiene mucho que ver. Además, como la mayoría de países del mundo, Israel demanda cada vez más agua debido al crecimiento demográfico.
Sorek (Israel)
Construida por la empresa española Sadyt, la desalinizadora más grande del mundo es la de Sorek, ubicada cerca de Tel Aviv, en Israel. Se inauguró en el 2013 y tiene una capacidad de tratamiento de agua de 624.000 m³/día. De esta cifra, 540.000 m³/día se utilizan para dar servicio al sistema de distribución de agua de Israel.
En contraste con la asociación popular de las plantas con un alto coste, esta planta permite de hecho un ahorro sustancial para el mercado de agua local. Además, su funcionamiento permite abastecer de agua a un país marcado por la escasez de agua.
Esta planta tuvo un coste de alrededor de 400 millones de dólares y su construcción se realizó en base al modelo construir-operar-transferir (BOT). El funcionamiento de la planta desalinizadora más grande del mundo se basa en la avanzada tecnología de desalinización por membrana de IDE.
Hasta la fecha, es la primera planta en utilizar membranas de 16″ en arreglo vertical. Al disminuir la cantidad de recipientes a presión, colectores, equipos de control e instrumentación, Sorek opera de manera más eficiente, aumentando la capacidad de la planta y reduciendo su tamaño.
IDAM (Israel)
Construida en 2013, la segunda planta desalinizadora más grande del mundo es IDAM. Se ubica en Ashdod, la sexta ciudad más grande de Israel. Tiene una capacidad de producción de 384.000 m3 al día y se basa en el sistema de ósmosis inversa.
Una de las características que hacen única a esta planta es el pretratamiento de ultrafiltración que realiza. Se trata de un proceso de pretratamiento para aguas superficiales, agua de mar, aguas subterráneas, efluentes tratados biológicamente para su posterior tratamiento. Debido a las dimensiones de IDAM, se trata de una de las infraestructuras más grandes del mundo.
Port Stanvac (Australia)
La tercera planta desalinizadora más grande la encontraremos en Australia. Situada en Port Stanvac, cerca de Adelaida, la ciudad con mayor población del estado de Australia Meridional, tiene capacidad para suministrar agua potable al 50% de la región. Su capacidad de desalinización se sitúa en 300.000 m³/día.
La planta desalinizadora más grandes de Europa
En territorio europeo, la planta desalinizadora más grande se encuentra en Torrevieja, Alicante. Dada su reciente apertura, se está trabajando para mejorar su funcionamiento. Se espera conseguir una producción diaria de 240.000 m³ de agua, la mitad de los cuales serán destinados al riego y la otra mitad para el abastecimiento de agua potable en municipios de Murcia y de Alicante. También utiliza el proceso de ósmosis inversa.