Con la llegada de las vacunas a varios países de América Latina y el Caribe, también los planes de recuperación pos COVID-19 van tomando relevancia. Es así que los gobiernos deben tomar las previsiones correspondientes y aprovechar nuevas oportunidades. De esta manera lo han entendido los países de la región, quienes recientemente lanzaron la Coalición de Economía Circular.
Esta es una iniciativa que busca impulsar la adopción de prácticas sostenibles para establecer un sistema económico sostenible en medio del proceso de recuperación de la pandemia. La XXII Reunión del Foro de Ministros de la región organizada por el Gobierno de Barbados, con el apoyo también del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), ha sido la ocasión para que los ministros de Medio Ambiente anunciaran la creación de la coalición.
“El planeta ya no puede soportar nuestra manera de extraer, usar y desperdiciar recursos. Es urgente construir una visión regional común sobre la economía circular. La Coalición que lanzamos hoy ayudará a hacer precisamente eso y a implementar prácticas concretas y medibles”, indicó Carlos Correa, ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia y presidente de la coalición.
Los países que formarán parte del primer comité directivo son Perú, Costa Rica, Colombia y República Dominicana. Son cuatro representantes de alto nivel que permanecerán en el periodo 2021-2022 .
Entre sus principales acciones, estarán coordinar el apoyo a gobiernos y empresas, especialmente a las pymes, para que tengan acceso a financiación e implementación de proyectos relacionados a economía circular. Vale recordar que esta apuesta consiste en la realidad que afronta nuestro planeta. Es dejar de lado los procesos de “tomar, fabricar y desechar”, que finalmente acaban con los recursos naturales que se dispone.
Una fortaleza de la Coalición de Economía Circular radica en sus ocho socios estratégicos permanentes. Ellos son el Centro y Red de Tecnología del Clima (CTCN), la Fundación Ellen MacArthur, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Fundación Konrad Adenauer (KAS), la Plataforma para Acelerar la Economía Circular (PACE), la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI), el Foro Económico Mundial (WEF) y el PNUMA.
“La creación de esta coalición reafirma el compromiso de la región con la implementación de la Agenda 2030, con especial énfasis en el ODS 12 de Consumo y Producción Sostenibles, a través de la promoción de la innovación, la infraestructura sostenible y una economía inclusiva y circular”, expresó Leo Heileman, director regional del PNUMA en América Latina y el Caribe.
Que la economía circular se incorporé a los procesos de producción, significa la posibilidad de que se reduzca el uso de materias primas en un 99% y promueva la conservación de la biodiversidad, señala el Panel Internacional de los Recursos del PNUMA. Por ello, es fundamental que junto con la coalición trabajen de la mano los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil.
Para Heileman, llegó la hora de dar un gran paso para dejar de emplear procesos que actualmente acaban con nuestra naturaleza. Frente a ello, la pandemia y la creación de la Coalición de Economía Circular representa una gran oportunidad. “Es tiempo de reconocer que los patrones de producción y consumo son la causa fundamental de la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación”, finalizó.