
ÚRSULA VEGA BENAVIDES
Experta en Imagen y Relaciones Públicas

En periodos de distanciamiento social como el que nos ha tocado vivir por la pandemia, debemos aprovechar el momento para construir relaciones y mantener vínculos con nuestros stakeholders. Hacer networking en esta coyuntura es un reto, pero no un imposible. Convirtamos esta etapa de crisis en una oportunidad.
Recordemos que cuando la agenda diaria nos desbordaba, la falta de tiempo y el estrés acumulado del día, eran una barrera para afianzar relaciones. Entonces, ¿qué oportunidades nos presenta el networking empresarial en esta “nueva normalidad”?
1) Descubrir nuestra propuesta de valor y saberla comunicar correctamente para empezar a construir relaciones de mutuo beneficio y a largo plazo.
2) Darnos cuenta del verdadero valor de la conectividad.
3) Cuidar nuestra red de contactos. Es el momento para actualizarla, así la mantenemos activa. Los tiempos económicamente complicados son la ocasión idónea para seguir en el radar de nuestros stakeholders, especialmente porque estas relaciones nos ofrecerán la oportunidad de conocer personas con intereses en común y encontrar nuevos clientes, proveedores o socios potenciales.
4) Pasamos más tiempo en las redes sociales y eso nos permite estar permanentemente conectados. Aprovechemos el espacio para compartir información valiosa y tener mayor visibilidad.
5) El networking empresarial en plataformas digitales es vital en este contexto, aumenta las recomendaciones y nos abre puertas a negocios internacionales.
6) Los webinars con temas de coyuntura se han multiplicado y su producción es constante. Formar parte nos ayuda a estar interconectados entre las partes y si los organizamos nosotros mismos, agregamos valor a nuestros grupos de interés. La idea es mantener el vínculo con los asistentes, más allá del evento propiamente dicho.
7) Ofrezcamos ayuda, ¡somos parte del equipo! Compartamos nuestras habilidades, aportemos ideas para sus proyectos. ¡Que cuenten con nosotros como un aliado!
En estos tiempos la empatía y la solidaridad juegan un papel muy importante. Aprovechemos el distanciamiento y tendamos puentes que nos sirvan para cuando podamos reunirnos de forma presencial. Si bien lo virtual es viable, estoy convencida de que las reuniones cara a cara son imprescindibles para hacer networking efectivo y que no desaparecerán.