Por: Denisse Torrico
Hemos estado pasando por un momento bastante tenso en lo político, ¿Cuánto ha afectado esta situación en las actividades mineras?
Efectivamente. Empezamos en un momento bien complejo, porque hubo reclamos que casi se salen de control. Bloquearon las vías, afectando el funcionamiento de las empresas mineras que tenemos, sobre todo en el sur. Eso conllevo a la casi paralización de muchas mineras y la reducción significativa de su producción. La industria minera produce un impacto importante en la economía del país, uno por el trabajo que genera para los peruanos y otro por el aporte que se hace en la economía, a través del impuesto a la renta y las regalías que se pagan. El impacto es tan importante para la economía que el sector minero aproximadamente le genera al fisco casi el 8% del PBI.
Actualmente ¿Cómo están las operaciones mineras? ¿Se han normalizado?
Asistimos a la Convención Anual PDAC 2023, realizada en Canadá, donde teníamos como misión revertir la situación y hacer recuperar la confianza a los inversionistas. Ahora podemos decir que eso ha sido solucionado y todas las empresas están trabajando de una manera normal. Puedo anunciar, además, que estas mismas empresas han confirmado más proyectos para ampliar sus operaciones. Después de lo que ocurrió el primer trimestre, donde la producción recayó, esto es importante para nosotros porque vamos a recuperar o quizá superemos el nivel de producción.
¿Qué empresas ya han anunciado proyectos que buscan ampliar sus operaciones?
Un ejemplo es Las Bambas. Tenían prácticamente un año de producción acumulado que no podían sacar por los bloqueos. Y tan pronto esto se reanudó, están sacando a buen ritmo los minerales. Por eso, nos anunciaron la ampliación del índice de una segunda etapa, que estiman va a hacer subir aproximadamente el 50% de lo que están produciendo ahora. También tenemos a Chinalco. Estamos bastante motivados y creemos que dio resultado la presentación que hicimos, causamos impacto.
Nos hemos reunido con casi todos los CEO de las grandes mineras que están en el país y todos se comprometieron a continuar con las inversiones. Nos manifestaron que lo que ven en este gobierno les daba estabilidad, tranquilidad y el compromiso de seguir apostando por el país.
¿Qué sigue para el sector minero en el futuro?
Si bien es cierto, hemos podido superar esta etapa de inercia donde se estaba paralizando todo, sabemos que lo más difícil es lo que sigue: la etapa de la sostenibilidad. Para ello, el trabajo que estamos haciendo en común acuerdo con las autoridades locales y con los inversionistas es hacer un trabajo de cumplir con los compromisos que son las expectativas de los pobladores.
Gas natural, aún se requiere de más
¿Cuántas personas no cuentan con gas natural?
El número es grande pero pensamos en el corto tiempo llegar a un número importante. En GLP solo tiene el 35%.
Usted señaló que se iba a reactivar el tema del Gasoducto. ¿Cuánto tiempo tomará ello? ¿Y qué otros proyectos se van a ejecutar a corto plazo?
El interés (sobre el gas) está presente desde el primer día de gestión. Al sector se le encargó que el gas llegará a donde no llega y con esa tarea, nosotros hemos dado un avance importante. Con el apoyo del presupuesto de Punche Perú, ya se firmaron los contratos y que ya deben haberse iniciado los trabajos para la red de masificación. Hay un contrato de más de 1.500 kilómetros de longitud de ductos que viene desde Piura a Tacna. Ya se firmó contrato con seis compañías, que vienen trabajando con contratos anteriores, que están sumando a esta inversión. Tenemos otros 800 millones de soles que estamos destinando a la masificación de redes en Madre de Dios, Puno, Cusco, Apurímac, Huancavelica e incluso Ucayali.
¿En qué consiste dicho proyecto?
Estamos trabajando los términos de referencia para que en el corto tiempo también se inicien los trabajos. A esa zona vamos a llegar al inicio con gas virtual. Unos camiones llevan el gas comprimido y a través de esas redes se lleva a las casas. Esto es provisional pero el objetivo mayor es completar el Gasoducto del sur. Ahí hay un tubo del 40% instalado, en el cual si lo ejecutamos vamos a ahorrar mucho dinero. Hay un juicio sobre eso. Si ganamos el juicio nos devolverán todo lo que estamos gastando.
Este proyecto se va a complementar con otro ducto que va a ir por la costa, en el cual vamos a desarrollar los proyectos petroquímicos.
Se venía retomando el diálogo para negociar el contrato con Camisea, ¿Cómo se viene trabajando en ello?
Dado que el contrato está como está, los factores que se emplean en su valorización del gas se deben ajustar a los indicadores internacionales. Si tomamos eso en cuenta es probable que el gas empiece a subir y si no renegociamos, entonces tendríamos que ver una forma que no afecte a los pobladores. La primera opción que tenemos es conversar con el consorcio, a fin de ver una fórmula que permita que el gas no suba su precio.
¿Hay una fecha establecida para tener resultados de estas negociaciones?
No, pronto vamos a solicitar las reuniones para tratar estos puntos. En el caso de que no logremos algo, es una opción. Tenemos que ver cómo hacemos las tarifas de tal manera que no afecte a los sectores más necesitados.
En este momento es importante que aprovechemos al máximo los recursos energéticos que tenemos de los hidrocarburos, porque en esta etapa ya están entrando las energías renovables. En el tiempo tenemos que ir sustituyendo el petróleo con las energías renovables.