Las cuencas de los ríos Corrientes, Pastaza, Tigre y Marañón ubicados en la selva norte del país han dejado de ser contaminadas por las aguas…
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Las cuencas de los ríos Corrientes, Pastaza, Tigre y Marañón ubicados en la selva norte del país han dejado de ser contaminadas por las aguas de producción petrolera, esto gracias a la culminación de la reinyección de estas aguas que se desarrolla en cumplimiento del Plan Ambiental Complementario de la empresa Pluspetrol Perú que explota los lotes 1 AB y 8, ubicado en la región Loreto.
Esta medida que implica inyectar las aguas al mismo reservorio de donde salen, sin contaminar las del subsuelo, es ejecutada en la Batería San Jacinto – Cuenca del Río Tigre desde el pasado lunes 18 de abril, lográndose así reinyectar el 100 por ciento de las aguas de producción de los lotes 8 y 1AB. |
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Esto se realiza en el marco del nuevo Reglamento de Protección ambiental para las Actividades de Hidrocarburos (Decreto Supremo 015-2006-EM) que prohíbe el vertimiento de las aguas de producción a los ríos, lagos y mar.
La reinyección de las aguas de producción es producto de la normatividad e instrumentos ambientales aprobados por el Ministerio de Energía y Minas (MEM) y por las acciones de supervisión y fiscalización del Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin). Cabe indicar que estos afluentes de la selva norte han sido impactados desde los años 70 por estas aguas que tienen altos grados de salinidad (8 veces más salada que el agua del mar) y altas temperaturas. La cantidad diaria que se disponía a quebradas y ríos llegaba a aproximadamente 1’100,000 barriles por día. “En resumen esto se concretó porque las entidades del Estado hicieron prevalecer el principio de autoridad de acuerdo a la competencia que les tocó asumir, las comunidades indígenas que estuvieron vigilantes a los avances y al cumplimiento de los compromisos asumidos por la empresa a cargo de los lotes 1 AB y 8 que constituyen los principales campos petroleros en producción en el país”, señaló un funcionario del MEM. Finalmente, el Ministerio de Energía y Minas informa que el vertimiento de las aguas de producción a los ríos y al suelo, significó el mayor impacto ambiental de la actividad de explotación de hidrocarburos en el país, el cual ya ha sido eliminado. |