Por Stakeholders
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Más de 40 mil estudiantes participaron en el “Premio Scotiabank al Emprendimiento”, que forma parte del programa Formando Emprendedores del Mañana, proyecto de Scotiabank en alianza con Plan Internacional que busca mejorar las capacidades sociales y económicas de los niños, niñas y adolescentes de Lima y Piura, así como fomentar valores en la comunidad. Por segundo año consecutivo, el proyecto trabajó durante todo el año académico con docentes y estudiantes entre los 7 y 17 años de edad con el fin de capacitarlos en educación financiera, emprendedora y previsional así como mejorar sus capacidades sociales.
Como parte del Programa, los estudiantes pueden participar aplicando los conocimientos adquiridos durante los meses previos. Con la asesoría de sus docentes y de especialistas del Programa, los estudiantes, en representación de sus respectivos colegios, desarrollaron planes de negocio para implementar ideas emprendedoras en sus zonas. Finalmente, los proyectos más destacados recibieron un porcentaje de los S/ 120,000 otorgados por Scotiabank como capital semilla para la implementación de todas las propuestas ganadoras.
“En Scotiabank creemos que nuestros niños, niñas y adolescentes tienen derecho a estar mejor, por eso junto con nuestros aliados de Plan Internacional consideramos que no solo deben recibir una formación básica escolar, sino, además una educación financiera que puedan aplicar a la vida y así todos juntos construir el Peru que queremos y merecemos. Desde Scotiabank trabajamos este proyecto con entusiasmo, alegría y compromiso, invitando a soñar en grande a todos nuestros niños, niñas y jóvenes,”, indicó Elbia Castillo, Vicepresidente de Auditoria de Scotiabank. “Este año los jóvenes nos han sorprendido con extraordinarias propuestas que no solo prometen generarles valor personal, sino también al resto de su comunidad”, finalizó.
Este año los proyectos han sido excepcionales: un total de 33 proyectos serán financiados de los casi 70 presentados por colegios de Lima y Piura. Ellos ponen en evidencia la consciencia social y ambiental de los niños, niñas y adolescentes: muebles ecoamigables para espacios educativos, agendas realizadas con materiales reciclados, lámparas de material ecológico, entre otros. “Hay mucho potencial en las propuestas de este año, pero, sobre todo, son una muestra de que, con una educación integral, se logra formar a los ciudadanos y ciudadanas del mañana en principios y valores que nuestro país necesita”, finalizó Castillo.
