En colaboración con el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado, la startup Tumi Robotics ha encaminado un proyecto que identifica el estado de lagunas en la sierra peruana
Con fines de conservación, la información sobre el estado de ecosistemas es de gran valor, permitiendo una mejor toma de decisiones. Ante la importancia de realizar un estudio físico y químico de lagos y lagunas a cargo del SERNANP, Tumi Robotics, startup peruana de tecnología, ha emprendido un proyecto que estudia cuerpos de agua en Huaraz, Ancash. Así, se conoce cómo se encuentran hoy, sobre todo ante el deshieles de glaciares, producto del cambio climático, y otros factores que afecten la integridad del agua.
Para esta iniciativa, Tumi Robotics empleó un robot que consiste de un bote autónomo, con 2 propulsores para moverse en el agua y capacidad de carga de hasta 50 kilos. Gracias a sondas multiparámetro, se identifica acidez, turbidez, oxígeno disuelto y clorofila; y un sistema de grúa facilita este análisis a distintas profundidades. Un sensor de batimetría permite calcular el volumen del cuerpo de agua, y se cuenta con la posibilidad de recoger muestras de agua para posterior estudio en laboratorio.
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Como reto, la unidad fue diseñada de modo que fuese viable ser transportada a zonas remotas por equipos de ingenieros y científicos. Adicional a eso, el robot debía ser fácil de ensamblar y de simple uso. De esta manera, con cada prueba de campo, se ha recabado información para optimizar el proyecto. Finalmente, para obtener un panorama completo del ecosistema, un dron digitaliza la superficie por encima del agua, con buenos resultados.
“La robótica ofrece grandes oportunidades para la inspección de cuerpos de agua con fines versátiles, ya sea industriales o medioambientales”, explica Francisco Cuéllar, CEO de Tumi Robotics. “Apoyándonos en tecnología para tareas que antes realizaban personas, se obtienen beneficios de gran calidad a más velocidad y se incita una mayor frecuencia, ya que implica menos recursos logísticos y humanos”, añade.
Con un impulso significativo, la tecnología nos acerca al cumplimiento de objetivos de desarrollo sostenible, promoviendo tareas de preservación medioambiental a menor costo, y de manera más rápida y eficiente.