El primer paso para poner al país en órbita e ingresar a la era aeroespacial con las nuevas tecnologías satelitales lo acaban de dar el Colegio de Ingenieros del Perú y la FAP, al firmar un convenio mediante el cual se proponen impulsar la inversión y capacitación en sistemas tecnológicos aeroespaciales.
La ceremonia se realizó en el marco de las actividades programadas por las Bodas de Oro del Colegio de Ingenieros del Perú y contó con la presencia del Decano Nacional Ing. Fernán Muñoz Rodríguez quien indicó que no se puede seguir postergando el progreso del país y la respectiva inclusión social que aportaría el sistema satelital.
“Es una herramienta tecnológica que permitirá al gobierno interconectar a los pueblos más alejados, prevendrá desastres, derrumbes e inundaciones, le servirá para combatir el narcotráfico y el terrorismo, administrar mejor los recursos naturales y las cosechas, contribuirá a incrementar nuestro PBI, por tanto, servirá para una eficiente toma de decisiones en el impacto ambiental, así como en la defensa nacional y otros”, señaló.
Por su parte, el ex presidente de OSIPTEL, Guillermo Thornberry, quien brindó una conferencia a los ingenieros sobre las TIC y su influencia en el desarrollo nacional, indicó que ahora las telecomunicaciones no son un lujo, sino la vía del desarrollo.
“Lo he dicho en el Congreso y ante el Ejecutivo, el Perú debe tener un satélite por su topografía y dispersión demográfica. Tenemos más de 50,000 poblados de 300 personas o menos, que tienen todo el derecho de que les llegue las telecomunicaciones. El satélite es una solución que puede llevarnos un par de años adelante y no es excluyente con respecto a la fibra óptica, que de todas maneras tiene que llegar a los andes”.
Añadió que el país tiene una brecha en telecomunicaciones de 1,620 millones de dólares que representa el 14.5% de la brecha de infraestructura de todo el Perú que es de 37,300 millones de dólares y que se ha perdido una gran oportunidad con la Interoceánica porque durante su construcción no ha considerado el tendido de fibra óptica.
Respecto al satélite de telecomunicaciones indicó que costaría 75 millones de dólares y habría que adquirirlo en el extranjero. “En el centro aeroespacial de Tailandia, que tiene tecnología francesa ya tienen dos satélites en órbita. Chile también tiene satélite. ¿Nosotros somos menos que Chile o que Tailandia? No, de ninguna manera. Podríamos hacerlo con los tailandeses si es que queremos salvaguardar algunos secretos geopolíticos. Manejaríamos nuestro propio satélite”, dijo.
Cabe señalar que en América Latina, Brasil y Chile lideran el desarrollo aeroespacial en la región. El vecino del sur ya cuenta con tres satélites en órbita que según el ministerio de Defensa chileno les ha permitido incrementar sus controles fronterizos y de soberanía marítima, resguardarse de desastres naturales, así como monitorear sus labores agrícolas, forestales y mineras.